Italia extrema a partir de hoy sus medidas para contener el coronavirus con el nuevo certificado sanitario reforzado, que restringe aún más las actividades a los no vacunados, además de aumentar los controles en autobuses, metro y zonas comerciales, principales focos de contagio en Navidad.
El nuevo certificado, en poder de los ciudadanos vacunados y de quienes hayan superado la enfermedad, será necesario para acceder al interior de bares, restaurantes, cines y teatros, pero también para entrar en eventos deportivos, discotecas, fiestas y ceremonias públicas, hasta el próximo 15 de enero.
El Ministerio de Sanidad ya ha lanzado una aplicación que permite comprobar la validez del "super certificado verde", como se le denomina en Italia y con una validez de nueve meses desde la última dosis para los vacunados y de seis meses para los que se hayan curado de la Covid-19.
Por contra, el certificado normal, que también incluye a los poseedores de una prueba de antígenos negativa, será obligatorio para trabajar, acceder al transporte público, entrar en los museos y transitar por las zonas comerciales, pero no en fin de semana, cuando deberá exhibirse el nuevo pase.
En coincidencia con la llegada del certificado reforzado, entran en vigor también hoy las nuevas medidas decretadas por el Ministerio del Interior para aumentar los controles de ambos pases sanitarios.
La policía nacional, los carabineros (policía militarizada) y el personal de los organismos de gestión del transporte público local se encargarán de pedir el certificado sanitario a los viajeros de metro y autobús a partir de los 12 años, lo que ha generado polémica sobre el transporte escolar.
Los menores desde esa edad deberán mostrarlo en los autobuses escolares y las regiones ya han pedido una "moratoria" para "permitir a todos ir a la escuela", una medida que será examinada por el Gobierno, que insiste en la necesidad de que los medios de transporte sean seguros.
El acceso a bares, restaurantes y otros lugares de ocio será controlado por agentes de la policía local y quien no disponga del certificado exigido para cada actividad se enfrentará a multas de entre 400 y 1.000 euros.
La entrada en vigor de estas nuevas medidas, entre las que se incluye también el uso de mascarillas en el exterior en los centros de las ciudades y zonas comerciales, ha impulsado la vacunación en los últimos días, en particular de las terceras dosis o de recuerdo.
A día hoy ya se han suministrado 8,6 millones, lo que supone que el 42,25 por ciento de la población ya tiene la de refuerzo, mientras que la cifra de inmunizados con pauta completa supera los 45,7 millones o un 84,76 %, a la espera de que la próxima semana comience la vacunación de los menores de 5 a 11 años.
En las últimas 24 horas, se han registrado en Italia 15. 021 nuevos contagios y 43 muertos.