De hecho, el consistorio castellarense es el único del Campo de Gibraltar que no cuenta con deudas en sus liquidaciones económicas. Se trata, además, de un caso particular a nivel autonómico, ya que son pocos los municipios de Andalucía que ingresan la lista de municipios sin endeudamiento.
En la provincia de Cádiz, sólo Benaocaz y Villaluenga del Rosario acompañan al territorio chisparrero en la ausencia de cuentas pendientes. Esta situación posibilita que los proveedores del Ayuntamiento reciben religiosamente sus ingresos. Además, la actividad económica del municipio se desarrolla normalmente sin la necesidad de recurrir a créditos financieros.
De hecho, el último préstamo que suscribió el Consistorio fue realizado por el alcalde, Francisco Vaca, en 1996, una operación que ya se cerró años atrás sin que quede ningún pago por realizar.
