El representante de esta asociación islámica, Mourad El Boudouhi, presentó en el registro del consistorio las alegaciones, en las que se argumenta que el ayuntamiento no tiene competencia para establecer una prohibición de este tipo y que ya hay normativa superior previa aplicable a este ámbito de la seguridad ciudadana.
Asimismo, las alegaciones señalan que la prohibición municipal, la primera que se aprobó en una localidad española, vulnera la libertad religiosa establecida en la Constitución y que supone una vulneración de los derechos fundamentales de las personas y una discriminación.
Por último, la asociación pide una reunión entre sus representantes y el ayuntamiento leridano para tratar los temas que afectan a la comunidad islámica.
El Boudouhi ha afirmado ante los medios de comunicación, después de presentar las alegaciones, que el Ayuntamiento de Lleida “ha cometido un error en contra de las mujeres en general y contra las musulmanas en particular” al prohibir el burka.
“Pedimos que respete las leyes que han votado todos los ciudadanos en este país y que la ciudad respete los acuerdos firmados por el estado español a nivel europeo y de las Naciones Unidas sobre la libertad religiosa y de respeto a las mujeres. Nadie tiene derecho de hablar y decidir por esas mujeres”, ha argumentado la asociación.
El representante islámico, que se autodenomina como “defensor del colectivo musulmán en España”, considera que la normativa debería modificarse para que las mujeres que lleven el velo integral y que quieran entrar en un equipamiento municipal puedan mostrar su rostro para identificarse y después puedan volver a tapárselo si así lo desean.
“Se le puede pedir la identificación y a partir de ahí que se respete su derecho a taparse o destaparse la cara para permanecer en el equipamiento público. También pedimos que si una mujer se niega a destaparse, que se le prohíba la entrada, pero que no se le multe”, explicó en referencia a la posibilidad de sanciones de hasta 600 euros previstas por la normativa leridana.
El Boudouhi ha atacado duramente al Ayuntamiento y a los grupos municipales que aprobaron la prohibición del velo integral (PSC, CiU y PP). “No van por buen camino. Consideran la ciudad como si fuera una propiedad privada que está fuera de este país. Esto no lo vamos a aceptar, no lo vamos a tolerar”, aseveró.