Las inusuales temperaturas llevan a muchos almerienses a la playa

El mapa de las temperaturas en España muestra en estos días valores diurnos anómalos, más propios de abril o mayo, por la presencia de una potente dorsal y de un anticiclón, que este viernes se traduce en Almería en termómetros con máximas de 28 grados que animan a sus vecinos a acudir a la playa como si fuese verano.

En la propia capital almeriense, el paseo marítimo luce lleno de viandantes con camisetas de manga corta y atuendos de poco abrigo que se valen del buen tiempo para caminar, correr o patinar, así como para disfrutar bajo el sol de una bebida refrescante en las distintas terrazas que salpican este rincón de la ciudad.

A apenas unos metros, en la arena, se yerguen las sombrillas y los presentes toman en sol tumbados en sus toallas o en sus sillas de playa, con los inevitables juegos con pelotas o paletas junto a la orilla, mientras los más atrevidos se dan un chapuzón en el agua del Mediterráneo que baña a la ciudad.

Y en el propio mar se puede observar a otros en embarcaciones o mientras practican deportes como el "paddle surf", lo que termina de completar una estampa casi estival, que no está completa debido a la falta de masificación habitual de los meses de julio y agosto.

Almería no es la única provincia andaluza con temperaturas elevadas para esta fecha del año, ya que en Granada también se registrarán a lo largo de este viernes valores máximos de 26 grados.

Para comprender esta situación hay que tener en cuenta dos factores: el primero, un anticiclón en superficie que favorece cielos despejados, viento en calma y mucha radiación solar (los rayos calientan el suelo y el aire, elevando la temperatura), además de actuar como barrera frente a las borrascas y precipitaciones, ha explicado a EFE Marcelino Núñez, portavoz de Aemet.

El otro factor es una dorsal muy potente en capas altas de la atmósfera, es decir, una estructura o patrón atmosférico asociada con la estabilidad a nivel medio de la atmósfera, a unos 5 km, y que "potencia" el efecto del anticiclón.

En este episodio, ambos componentes, anticiclón y dorsal, tienen mucha presión y eso es "lo más significativo", ha detallado el meteorólogo.

Las dorsales suelen inhibir la formación de nubes y precipitaciones para promover un tiempo tranquilo y seco, con cielos despejados y temperaturas más cálidas que implican estabilidad y nieblas de irradiación nocturna en los territorios de interior.

En este punto, el experto ha señalado, como hecho curioso, que en las latitudes en las que se enmarca la Península Ibérica, los anticiclones más potentes son típicos del invierno, a pesar de que estos se suelen asociar con sol, calor y por tanto con el verano.

Debido a esta configuración atmosférica, para mañana, y según datos de Aemet, las temperaturas máximas aumentarán o se mantendrán con pocos cambios en amplias zonas del país, con mayor intensidad en el litoral mediterráneo andaluz y litoral sureste, dejando valores altos para la época en la mayor parte de España, y con heladas únicamente en cotas altas de Pirineos.