Los trabajadores se concentraron desde primeras horas a las puertas de sus respectivos centros de trabajo para acudir luego a la convocatoria de asamblea prevista a las puertas de Acerinox en Palmones.
Manifestación
El comité informó que llevará a cabo una manifestación-concentración desde Acerinox a la Subdelegación del Gobierno el próximo día 2 de diciembre desde las 10.00 horas. Movilización que se irá intercalando con sucesivas acciones “hasta conseguir el propósito de los trabajadores que pasa por que la empresa retire los traslados”.
El presidente del comité, José María Reula, indicó que se ha denunciado ante la Inspección de Trabajo “una vulneración del derecho a la huelga ya que la empresa está obligando a los trabajadores a acudir a un retén de guardia que existe en cada uno de los centros de trabajo camuflándolos éstos como unos servicios mínimos que ni se han negociado con el comité ni los han obtenido de la autoridad laboral”.
En este sentido, “y para evitar males mayores”, el comité recomendó a los trabajadores “que acudan a esos retenes y que luego si la autoridad laboral decide que esos retenes no deben cumplirse ya se denunciará esta situación”.
Tras la asamblea se decidió realizar una concentración de protesta ante la sede de Imtech Spain, sita en el edificio de negocios Azabache. Así, “varios cientos de trabajadores” caminaron e “irrumpieron en una sonora protesta en el interior del edificio forzando un nuevo encuentro entre la dirección de la empresa y el comité que finalmente se saldó sin soluciones”.
Por otra lado, fuentes del comité confirmaron la celebración hoy a las 11.00 horas de una nueva reunión para tratar de acercar posturas. En principio, tras el encuentro se informará a la plantilla si bien las fuentes señalan que “confiamos en que haya una solución, aunque depende más de ellos que de nosotros”.
Apoyo PCA
El responsable comarcal de Movimiento Obrero, José Luis Guerrero, mostró ayer el “apoyo total del Partido Comunista de Andalucía a las justas reivindicaciones de los trabajadores y del comité de empresa”.
Para Guerrero, la empresa intenta “mediante la fórmula de traslados forzados provocar despidos encubiertos”.
