La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a dos años de prisión a un hombre acusado de traficar con éxtasis, anfetaminas y ketamina en las proximidades del festival de música electrónica Dreambeach Villaricos, que se celebraba en Cuevas del Almanzora (Almería), durante julio de 2022.
El fallo, consultado por Europa Press y dictado en firme por conformidad de las partes, impone al acusado dos años de prisión por un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño a la salud así como el pago de una multa de 1.000 euros.
La sentencia da por probado que el acusado fue sorprendido en la playa de Quitapellejos de la citada localidad cuevana cuando se dirigía hacia la zona de conciertos del macrofestival cuando fue intervenido por los agentes.
Así, durante el registro de sus pertenecidas al que fue sometido, se le localizó en posesión de varias dosis de ketamina, anfetamina y de MDMA valoradas en más de 1.300 euros en su conjunto, con las que tenía intención de traficar a lo largo del evento mediante su comercio ilícito.
Al acusado se le encontraron 0,79 gramos de mezcla de MDMA y ketamina valorados en 37,2 euros así como dos lotes más con 7,26 gramos y 1,87 gramos cada uno de anfetamina de bajo nivel de pureza pero valorados en el mercado negro en casi 184 euros.
De igual modo, fue hallado en posesión de hasta seis lotes éxtasis con un peso total de 31,27 gramos de distinto nivel de pureza y un valor de 1.087,71 euros. El valor total de los estupefacientes intervenidos habrían superado los 1.308 euros. En este sentido, el hombre ya llevaba consigo 169,65 euros "fruto" de ese tráfico ilícito.
El tribunal accedió a la suspensión de la pena privativa de libertad por un periodo de tres años con la condición de que el condenado no vuelva a delinquir durante dicho periodo de tiempo.