Algunos después de quince años, otros después de diez y así sucesivamente... Pero el problema no es sólo el hecho de quedarse en paro, sino que ahora la lucha de la plantilla de los 300 trabajadores afectados por la situación de Polanco es saber qué dinero van a percibir si se tienen que ir a su casa y de qué manera lo van a recibir.
“Aquí hay muchas criaturas que están pagando entre 500 y 600 euros de casa, y lo más grave es que aquí todos somos mileuristas, con lo que apenas nos van a quedar 600 euros de paro”, afirmaba uno de los afectados.La incredulidad invade a muchos de ellos, que han visto como de estar trabajando a un ritmo infernal durante el verano (chiringuitos, arreglos de colegios, etc.), quedándose incluso sin vacaciones, han pasado al más absoluto ostracismo desde el pasado mes de septiembre.
Primero un ERTE, luego la empresa se ha acogido a un concurso de acreedores y, su último plan, es practicar un ERE extintivo que se lleve por delante a todos y cada uno de los operarios.“Ha ganado mucho dinero”“Ha ganado mucho dinero durante los últimos años, todos sabemos que ha facturado millones y millones, pero probablemente por una mala administración del propietario nos vemos ahora en esta situación 300 familias”, señalaba a este medio otro de los afectados.
Una de las cuestiones que más está indignando a los trabajadores de todo este proceso de desintegración de la empresa que está padeciendo la plantilla es que nadie de la planta noble se haya puesto en contacto con ellos para darles explicaciones al respecto. “En ningún momento han sido capaces de dar la cara ante los trabajadores, y es esa incertidumbre lo que a la mayoría de nosotros nos está matando”, señala otro afectado, quien añade que “nadie sabe si nos va a despedir y nos va a pagar lo que nos tiene que dar, o si el cerrojazo será dentro de dos días”.
Ahora bien, está claro que van a mantener la posición de fuerza que han iniciado esta semana con las diferentes concentraciones realizadas a las puertas de la empresa (hoy tendrá lugar la última de este semana), además de cuantas reuniones sean necesarias con representantes políticos, tanto de Chiclana como de la Junta en Cádiz o en Sevilla. “Si nos tenemos que ir, que nos vayamos con lo que realmente nos corresponde”, añaden.
Y es que algunos están más que contrariados, puesto que han tenido conocimiento de oídas que la empresa “no tiene dinero para hacer frente a las indemnizaciones”, y que si van a percibir algún dinero tendrá que ser procedente del Fondo de Garantía Salarial.
De todas formas, y a pesar de que son pesimistas con su futuro, entienden que la empresa no está teniendo paciencia y no da un margen de confianza a una posible salida. “Ojalá sean capaces de esperar hasta que la jueza apruebe el concurso de acreedores, vengan los administradores judiciales y sean ellos los que digan si realmente Polanco tiene o no futuro. Mientras tanto, que se retrotraigan de esa idea que tiene de hacer el ERE”.
Aparcan las protestas
CCOO, a través de su Sindicato Provincial de Construcción, Madera y Afines ha asegurado que los trabajadores y trabajadoras de Polanco han decidido aparcar las protestas contra el cierre de la empresa en Chiclana hasta el miércoles próximo.
En concreto, los representantes sindicales han señalado que la plantilla ha acordado en la asamblea celebrada esta mañana durante la última concentración de protesta de la semana, que las nuevas movilizaciones se decidirán el miércoles, en otra nueva asamblea en función del resultado de la reunión prevista entre las tres partes –empresa, representantes sindicales y delegado provincial de Empleo- el martes próximo.
“Sabemos que el grupo ya ha presentado ante el Juzgado de lo Mercantil de Cádiz los cuatro EREs para liquidar las tres empresas que tiene en Chiclana y también una cuarta de Granada, pero también estamos convocados a ese encuentro que ha organizado Juan Bouza para tratar de buscar una salida a este conflicto y evitar la pérdida de los 300 puestos de trabajo que están amenazados”, han aseverado los responsables sindicales.
A juicio del Sindicato Provincial de Construcción, Madera y Afines de CCOO Cádiz, el encuentro con el titular provincial de Empleo del martes supone una nueva oportunidad para tratar de zanjar esta situación por las repercusiones que tendría para los 300 trabajadores y trabajadoras y sus familias.
