Una misión de expertos de la Unesco evaluó el impacto de la torre en el paisaje sevillano y ha recomendado cambios en el proyecto para evitar salir de la lista de Patrimonio de la Humanidad, ha informado hoy informó a Efe una fuente de la organización.
El informe, elaborado por el grupo Icomos, será presentado ante el Comité de Patrimonio de la Agencia de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que ya pidió en junio que se detuviera la construcción de la obra, llamada a ser el edificio más alto de Sevilla, un consejo que no fue seguido por las autoridades sevillanas.
El director del Centro del Patrimonio Mundial, Koshore Rao, ha pedido en una carta a las autoridades españolas que "se reconsidere el actual proyecto para evitar posibles impactos adversos" en la calificación de la ciudad como Patrimonio de la Humanidad.
Los expertos consideran que la torre Pelli "tiene un excesivo e indudable impacto negativo" en la zona de "amortiguamiento" de 187 hectáreas que rodea el núcleo protegido de 12 hectáreas, en el que se incluye la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias.
La torre Pelli, ideada por el arquitecto argentino-estadounidense César Pelli para la entidad Cajasol, está concebida para tener 42 plantas y 178 metros de altura, muy por encima de los 92 metros de la Giralda.
Fuentes de la Unesco consideran que el Comité del Patrimonio puede seguir las recomendaciones de los expertos, lo que se traduciría en la pérdida de la categoría de Patrimonio de la Humanidad de la ciudad.
El embajador español ante la Unesco, Jon de la Riva, ha mostrado a Efe su preocupación por este asunto y apostó por encontrar "una solución que no sea radical en ninguno de los dos casos".
"Hay que intentar que se respete el impacto visual y que Sevilla no pierda su lugar en la lista de la Unesco, porque es una ciudad con potencial para incluir otras manifestaciones en la misma, como la Feria de Abril o la Semana Santa", ha dicho el embajador.
Solo dos lugares han salido de esa lista a lo largo de la historia: la ciudad alemana de Dresde, que lo hizo cuando en 2009 sus ciudadanos no renunciaron a la construcción de un puente sobre el Elba; y el santuario de los óryx árabes de Omán, apartado en 2007 a petición del sultanato, deseoso de explotar el petróleo hallado en esa zona.