Así, el portavoz socialista, Juan Espadas, adelantó ayer que seguirán preguntando por la contratación y facturación en los talleres de los distritos después de haber constatado que varios de los monitores les habían comunicado “que se les iba a pagar menos, cuando eso no debía ser así”.
Espadas asegura que están investigando -aunque reconoce que la recopilación de datos es “dificultosa”- “dónde iba el dinero de las empresas destinado a monitores” si no era para ese concepto. “Estamos preguntando en los distritos, uno tras otro, y ya lo hemos hecho en cinco o seis”, asegura.
Al PSOE, apunta, no sólo le preocupa por las personas en sí que habrían sido contratadas, sino de criterios tales como desde cuándo están percibiendo salario y a cuánto asciende éste, en calidad de qué y, en resumen, “la gestión económica” de este asunto.
Por su parte, el portavoz de IU, Antonio Rodrigo Torrijos, mostraba ayer su estupor ante los nuevos casos de enchufismo que están aflorando en los últimos días vinculados a distintas instancias municipales, “sin que el alcalde de la ciudad se inmute lo más mínimo ni haga nada por cortar de inmediato una práctica que siempre rechazó desde la oposición y que, sin embargo, ahora ejerce y permite con desmedida fruición”.
Torrijos se pregunta “qué más tiene que pasar” en la capital hispalense para que el señor Zoido “dé la cara de una vez” y proceda a cesar a todos los dirigentes del PP o de Nuevas Generaciones (NNGG), así como a los familiares y allegados de concejales de su partido que siguen colocados en los talleres de los distritos.
En este sentido, aseguró no salir de su asombro ante el “grotesco e incesante goteo de casos de nepotismo que vamos conociendo cada día”, siendo la concejal del PP en Lucena del Puerto (Huelva), Socorro Moreno, y el secretario de Relaciones Institucionales de NNGG en Andalucía, Víctor Mora, los últimos ejemplos de una concatenación de contrataciones “tremendamente sospechosas y evidentemente partidarias”.
