La Delegación territorial de Educación, Cultura y Deporte en Sevilla ha replicado hoy a la queja del claustro de profesores del IES Los Álamos de Bormujos (Sevilla) por otorgar el graduado en Secundaria a un alumno con cinco suspensos que no es una "decisión política sino técnica".
En un comunicado, responde así a un escrito de queja del claustro de profesores en el que denuncian que la Delegación de Educación de Sevilla ha otorgado la graduación en Secundaria a un alumno con cinco asignaturas suspendidas, aunque dos de ellas se las aprobó la administración en contra del criterio de los docentes.
La Delegación defiende que la reclamación por calificaciones es un procedimiento reglado por normativa, que "constituye una garantía para el estudiante y para el profesorado" y añade que para la objetividad del proceso de evaluación del alumnado se establece una doble instancia.
Por un lado, la presentación de un primer escrito ante el centro donde está matriculado el alumno y que resuelve el departamento de la materia reclamada y, por otro lado, en segunda instancia el alumno puede presentar su reclamación ante la delegación territorial que, previo informe de una comisión técnica de reclamaciones, resuelve, dejando abierta la vía administrativa.
Esta comisión está integrada por inspectores de Educación y por profesorado especialista de la materia ajeno al centro del alumno que reclama y emite un informe con la propuesta, según la nota.
A continuación, la Delegación resuelve en vía administrativa con el informe de la comisión técnica y, por tanto, asegura que "no es una decisión política sino técnica" la referida al alumno del citado Instituto de Enseñanza Secundaria de Bormujos.
En cuanto al número de reclamaciones en Sevilla, la delegación recibió el curso pasado 290, de las que se estimaron 55 y 235 fueron desestimadas por la comisión técnica, es decir, un 18,97 %, y se desestimaron la mayoría, un 81,03 %.
El total de reclamaciones presentadas suponen el 0,06 % del alumnado, según la Delegación de Educación.