El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, comienza este jueves una ronda de contactos con los distintos grupos parlamentarios, a quienes se ofrecerá "un guión temático" de los ejes principales del proyecto de Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) en busca de "acuerdos parciales" que den continuidad a los aspectos sistémicos de la reforma que plantea. Sin embargo, los grupos ya han anunciado enmiendas a la totalidad para devolver el texto al Gobierno, salvo Foro de Asturias y UPN.
Así lo ha explicado ante la Comisión de Educación del Congreso, donde ha defendido que si bien "puede haber aspectos con más distancia ideológica entre esta propuesta y las legítimas opiniones de distintos grupos", sobre los aspectos nucleares como la enseñanza, los itinerarios, las materias y las evaluaciones, "no es fácil decir con sinceridad que haya diferencias enormes".
"Mi propuesta sería (...) que tuviéramos la capacidad de explorar aquellos aspectos que verdaderamente constituyen el objetivo central de la ley y de verdad veamos si las distancias son tan grandes como puede parecer o existe la posibilidad de llegar a un acuerdo, porque nosotros entramos en ese diálogo sin el establecimiento previo de líneas rojas", ha señalado.
En su opinión, la negociación debería inspirarse en el modelo irlandés, donde los distintos partidos se han puesto de acuerdo para respetar una serie de aspectos del sistema educativo al menos, hasta el año 2020.
"Este es un asunto que merita el esfuerzo de todos por alcanzar, si no es posible un acuerdo total, acuerdos parciales que consigan que al menos no exista en la sociedad la impresión de que no somos capaces de dejar ciertos elementos del sistema educativo al socaire de los vaivenes políticos", ha añadido.
Para Wert, los ejes de la norma "son soluciones todas ellas basadas en la evidencia, en los elementos de debilidad que presenta el sistema" que aplican la respuesta dada por "aquellos países que se han enfrentado en un momento anterior a problemas iguales o semejantes y que los han resuelto con éxito".
Además, se ha referido a la "permanente referencia al aislamiento o soledad" del Gobierno en la reforma que denuncia la oposición para afirmar que se trata de una soledad, en todo caso, "espléndida". "Estar aislado acompañado de la mayoría de las dos Cámaras, con el apoyo de la formación política que obtuvo esa mayoría absoluta y a pesar de ello, estar haciendo un permanente ofrecimiento de diálogo, creo que, francamente, es una soledad muy acompañada", ha señalado.
El ministro, que ha comparecido tanto por motu propio como a petición del Grupo Socialista, Izquierda Plural, Grupo Mixto, CiU y UPyD, ha repasado los "pilares básicos" de su reforma, así como los cambios que se han introducido en el proyecto de ley a raíz de las recomendaciones del Consejo de Estado.
Así, se ha referido a la memoria económica y ha anunciado que el grupo creado en la última Conferencia Sectorial de Educación "ya está constituido" y ha empezado a trabajar para "mejorarla y poder incorporar algunos aspectos quizá desconocidos (para la Administración General del Estado) en base a la experiencia de las comunidades autónomas", lo que, en su opinión, "será importante de cara al desarrollo de la ley".
También ha vuelto a referirse a la cuestión lingüística en Cataluña para insistir en que la previsión de la LOMCE "es un mecanismo de garantía" para que los padres puedan ejercer su derecho a elegir la educación vehicular en castellano para sus hijos cuando la administración educativa no la oferte. No obstante, ha afirmado que el Gobierno "no está en una posición intransigente" y dispuesto a sentarse y discutir las propuestas que la Generalitat tenga al respecto.
Asimismo, ha defendido su propuesta de reforma de la Formación Profesional y ha concretado que existen experiencias piloto de FP Dual en todas las comunidades autónomas que cuentan con la participación de 400 empresas. "Sabemos que lleva mucho tiempo la implantación pero lo que en modo alguno podemos conceder es que lo que hasta ahora se ha avanzado sea desdeñable o haya puesto de manifiesto la inviabilidad del sistema", ha señalado.
QUE EL TEXTO SEA DEVUELTO AL GOBIERNO
En el turno de la oposición todos los portavoces presentes en la comparecencia, salvo PP, UPyD y Foro de Asturias han manifestado su intención de presentar una enmienda a la totalidad a la ley, es decir, pedir que el texto sea devuelto al Gobierno. Eso sí, Rosana Pérez, del BNG se ha atrevido a ir más allá solicitando también al ministro su dimisión.
Por otro lado, gran parte de las críticas a Wert se han enfocado en la falta de consenso con la comunidad educativa a la hora de elaborar esta reforma educativa. "Está solo", le ha advertido el portavoz socialista, Mario Bedera, mientras que el republicano catalán, Alfred Bosch, le ha "felicitado" por el consenso conseguido, aunque en contra de su norma.
El hecho de que la asignatura de Religión se mantenga como evaluable y vaya a contar para la media final de la nota, así como la financiación de los centros que segregan por sexos, han suscitado igualmente reproches de todos los grupos parlamentarios, salvo de CiU, Foro de Asturias y PP.
Así, le han preguntado de qué manera un cambio en la calificación de esta asignatura va a contribuir a combatir el fracaso escolar, uno de los principales objetivos de la ley. "Se encuentra prisionero de la jerarquía católica", ha criticado Bedera, al mismo tiempo que Carlos Martínez Gorriarán considera que se trata de creencias que no se pueden evaluar, como sí lo es la asignatura de Ética, que es su alternativa.
En relación a la Formación Profesional, Caridad García Álvarez, también de la Izquierda Plural, ha avisado a Wert de que el modelo que quiere implementar es "imposible de aplicar" porque el tejido empresarial español es mayoritariamente de pymes, a la vez que su compañero de grupo parlamentario, Joan Coscubiela, ha avisado de que esta ley va a privatizar la educación pública.
Las críticas sobre el tratamiento de las lenguas cooficiales las han protagonizado vascos y catalanes, como Isabel Sánchez Robles, del PNV, quien ha advertido a Wert de que en Euskadi "se lee, se escribe y se habla" mejor que en otras comunidades autónomas. "¿Cree que Euskadi necesita una reforma educativa? La suya es regresiva para nosotros", ha puntualizado. Wert ha respondido a esta cuestión que, "en unas cosas sí y en otras no".
Del lado catalán, tanto Martí Barberà de CiU, como Alfred Bosch de ERC, o Joan Coscubiela de ICV, han reivindicado que la lengua catalana ha sido la garantía de cohesión de la sociedad catalana en estos últimos años.
En cambio, Sandra Moneo, del PP, ha criticado que aún en la Cámara algunos grupos de la oposición consideren que la educación "va por buen camino" y no vean necesaria esta reforma. A Carlos Martínez Gorriarán, que sí cree que es necesaria una reforma de la Educación en España, aunque esta ley que ha presentado el Gobierno no le gusta, advierte de las diferencias entre comunidades autónomas que obedecen a un patrón 'norte-centro-sur'.
Desde Foro de Asturias, Enrique Álvarez Sostres, que no ha pedido la devolución del texto al Gobierno, sí ha señalado que no le gusta la ley y la ve mejorable en el trámite parlamentario, al mismo tiempo que echa en falta más apoyo al profesorado en la ley.
