El conflicto laboral que ha venido padeciendo estos últimos años la plantilla que presta el servicio de ayuda a domicilio parece haber resquebrajado la unidad sindical, hasta el punto de que CCOO y CGT han cruzado distintas denuncias coincidiendo con el proceso de renovación del comité.
Este pasado lunes se celebraron unas elecciones sindicales que, no obstante, deberán repetirse dado que el CMAC ha observado defectos de forma en el censo, atendiendo de este modo una reclamación de CCOO, que hasta ahora era el sindicato mayoritario.
A pesar de que las elecciones carecen de validez, la realidad es que la candidatura presentada por CGT obtuvo 199 votos sobre un total de 305 posibles, lo que le otorgaría nueve delegados en el comité, por tres de CCOO y uno de UGT. En las elecciones, según CGT, participó el 75 por ciento del censo, frente al 35 por ciento que lo hizo en la anterior convocatoria.
Un nuevo proceso
CGT entiende que el laudo que obliga a repetir el proceso es “injusto”, a pesar de lo cual no va a ser recurrido, ya que se entiende que el camino más breve para cerrar el contencioso es convocar nuevas elecciones.
Este sindicato entiende que el resultado de la votación no fue “fruto de la casualidad”, sino de la práctica de “un sindicalismo basado en el asamblearismo y la lucha”. “Todos nuestros afiliados y simpatizantes han participado en los debates y decisiones que han tenido que irse tomando ante los muchos conflictos que han venido padeciendo, una actitud muy distante de la que practican los grandes sindicatos, que en muchos casos hacen caso omiso a los intereses de los trabajadores”, explica CGT.
CCOO entiende que este no era el momento de celebrar elecciones al encontrarse la plantilla pendiente de ser subrogada por una nueva empresa concesionaria.
