Llega el verano y los medios de comunicación se empiezan a hacer eco de la reducción de camas en los hospitales y del cierre de los centros de salud por las tardes, a pesar de que una provincia como Cádiz multiplica su población con la llegada de miles de turistas procedentes de distintas partes de España y del mundo. Pero los problemas relacionados con el mundo sanitario no se ciñan a la época estival. Desde antes de la crisis, los profesionales de este sector tienen que lidiar con recortes de plantilla, por lo que la situación económica ha servido para empeorar la decadencia que el sistema venía padeciendo a nivel de contratación de personal.
—Lleva usted cinco meses al frente del Colegio de Médicos de Cádiz, ¿qué balance hace de este tiempo?
—Aunque tomé posesión como presidente hace cinco meses, lo cierto es que llevo 20 años perteneciendo a las juntas directivas del Colegio. Yo diría que el aterrizaje del equipo ha sido bueno y suave, porque entre otras cosas la infraestructura del organismo viene funcionando muy bien desde hace mucho tiempo. La junta actual está compuesta en un 50 por ciento por personas que han pertenecido a equipos anteriores y en otro 50 por ciento por gente nueva, con ilusión, ganas de hacer cosas y aportar ideas nuevas. Ahora queremos aprovechar esa pista de aterrizaje para despegar y seguir creciendo.
—¿El que haya gente joven en la junta de gobierno permitirá acercarse más a la nueva realidad del mundo sanitario?
—Exactamente. Además, hemos aumentado el número proporcional de mujeres dentro de la junta directiva. Tenemos representantes de Atención Primaria, Hospitales, medicina privada, etc. Es decir, hemos querido cubrir todas las áreas de la profesión.
—¿Cuál ha sido su trayectoria hasta convertirse en el presidente del Colegio de Médicos?
—Estudié Medicina en Sevilla y me especialicé en Neurocirugía en el Hospital Virgen del Rocío. Cuando terminé el MIR me vine a Cádiz y empecé a ejercer en el Hospital. Hace unos años que estoy en excedencia del sistema público y trabajo en la empresa privada. En lo que respecta al Colegio, he desempeñado el cargo de Tesorero en el equipo presidido por Antonio Lorenzo, Ricardo Mirada y Miguel Morgado, mi antecesor en el cargo.
—¿Cuál es la situación actual de la profesión en hospitales y Atención Primaria?
—El Colegio está bastante preocupado por cómo se está desarrollando el ejercicio de la profesión. Los médicos han estado mal durante años, pero la situación se ha agravado. Los profesionales ven que no se aprecia su trabajo, les recortan los sueldos, etc. y los nuevos se encuentran con otro problema peor que es que no les hacen contratos estables, sino temporales, y en condiciones precarias. Parece que esto puede mejorar en los próximos meses, porque las autoridades sanitarias están por la labor de ir solucionando la situación. De momento se están percibiendo algunos cambios pequeños, e insuficientes, pero apuntan en buena dirección. El compromiso es que a partir de noviembre los contratos se harán de un año de duración como mínimo. Otra cosa es que finalmente se pueda hacer realidad. Todos somos conscientes de los recortes presupuestarios, pero no entiendo que no se recorte de otros conceptos menos importantes o prioritarios.
—¿Es cierto que hay diferencias entre el sistema sanitario andaluz y el de otras comunidades autónomas como por ejemplo Madrid o Valencia?
—No nos libramos de los recortes. Si somos diferentes es hacia peor, porque unimos los recortes del Estado con los de la Junta de Andalucía. Esta región sigue siendo de las que peor paga a sus médicos y de las que tiene menos ratio de profesionales por pacientes, por poner sólo dos ejemplos.
—Es difícil cuantificar los recortes de la nómina, pero pueden rondar el 30 y el 40% con respecto a 2008...
—Es difícil cuantificar. Todos se han visto afectados pero unos más que otros.
—La Junta de Andalucía ya ha puesto en marcha un nuevo Plan de Urgencias Hospitalarias por el que se pretende mejorar los tiempos de atención para evitar aglomeraciones, ¿cree que se podrá aplicar?
—Desconozco el plan. No sabemos en qué consiste, ni cómo lo van a hacer. El fondo me parece loable, pero no creo que lo puedan conseguir sin aportar más dinero, más medios y una infraestructura concreta.
—¿Los sindicatos creen que no será posible?
—El personal actual está trabajando a tope, así que con los recursos que hay no sé cómo lo van a hacer. Nos lo tendrán que explicar o tendremos que esperar a verlo.
—En su día fue MIR, ¿qué diferencias ve con su época en la formación de estos nuevos médicos?
—Diferencias hay muchas. Hoy se exigen muchos conocimientos técnicos. Antes era mucho más fácil acceder a una plaza MIR y una vez que se terminaba la especialidad teníamos trabajo. Era todo más rodado; poco a poco todo se ha ido masificando. Los residentes siempre hemos sido autodidactas y por ósmosis íbamos aprendiendo. En mi época no había nadie que se encargase de formarnos, y ahora tampoco. El residente sigue siendo autodidacta, lo que pasa que ahora tienen muchos más medios que antes. Hay más bibliografía, acceso a Internet, etc.
—Muchos de esos recién licenciados se ven en la obligación de irse fuera por falta de alternativas en España. ¿Cuáles son los países que más demandan a médicos españoles?
—El que más es Reino Unido y después Francia, Alemania y Portugal. Cada vez hay más demanda en Surámerica y centroamérica.
—¿Le han llegado quejas de médicos que se hayan ido fuera a trabajar y haya resultado ser una estafa?
—Quejas no me han llegado, pero nos preocupa. La Organización Médica Colegial a nivel nacional ha abierto una oficina de promoción de empleo médico dirigida por personas competentes que se dedican a buscar trabajo en el extranjero. Es decir, que no sólo recibimos ofertas, sino que también las buscamos para acercárselas a nuestros profesionales. Esta oficina lleva un control estricto de las ofertas para que el médico se vaya con todas las garantías. En Cádiz hemos abierto una delegación de esa oficina para hacerle llegar las ofertas a nuestros colegiados. Tenemos una red nacional muy amplia y bien organizada desde Madrid. Además, se están haciendo cursos de idiomas, cursos de preparación para conocer el país al que van y su estructura sanitaria.
—¿Percibe interés por parte de los jóvenes para aprovechar estas ofertas de empleo?
—Naturalmente, porque no tienen otra alternativa. Nadie quiere irse fuera. Lo hacen porque aquí no encuentran nada estable. Los médicos buscarán por su cuenta pero están acudiendo también al Colegio de Cádiz y a la Organización colegial como vía de canalización de esas ofertas. Y es penoso que se nos vayan fuera con lo que cuesta formar a los médicos. Más de 4.000 profesionales se han tenido que emigrar en los últimos años.
—El Tribunal Supremo ha zanjado la obligatoriedad de la colegiación. Ahora, todo el que quiera trabajar debe colegiarse en Andalucía, con independencia de que lo haga en la pública o en la privada.
—Me gustaría aclarar que la colegiación ha sido obligatoria siempre, porque así lo dice la Ley y la Constitución. Lo que ocurre es que hubo un decreto-ley de la Junta de Andalucía para eximir de la obligación a los que trabajasen en exclusiva para el SAS. Ese decreto se recurrió y el Tribunal Supremo restableció lo que debe ser. La colegiación no tiene otro sentido que la defensa de la población, es decir, que los que ejercen la medicina estén controlados por un colegio profesional que fiscalice su formación, su ejercicio profesional y su ética. Va en beneficio de la población y no de los médicos, por eso es obligatorio.
—¿Cuántas altas se esperan en la provincia?
—Desde mayo para acá se han dado de alta 250 médicos y esperamos que de aquí a octubre lo hagan otros 250.
—José Luis Ortiz es una abogado gaditano que lleva muchos temas sanitarios. Según él en los últimos años están notando un incremento de denuncias a médicos que trabajan en el sistema público por negligencias, tanto es así que ya prácticamente se equipara a los números alcanzados por la medicina privada. Él lo achaca a los recortes presupuestarios, ¿está usted de acuerdo?
—No es esa la impresión que tengo yo. Creo que el número de denuncias es el de siempre. De todas formas me gustaría decir que en España hay dos defensores del paciente. El primero y más importante es el propio médico, y el segundo es el Colegio de Médicos, porque nuestra función no es defender al médico sino el ejercicio de la Medicina y como tal al propio paciente.
—¿Van a estrenar sede nueva en Jerez de la Frontera en breve?
—Sede en Jerez y Algeciras tenemos desde hace años, pero es un local pequeño, poco funcional y alquilado. Ahora vamos a abrir una sede propia, mucho más amplia y moderna, que abarcará a los profesionales de toda la Sierra, Sanlúcar, Chipiona, Rota y El Puerto de Santa María. Posiblemente la inauguremos en septiembre u octubre.
—El Colegio de Cádiz tiene como política destinar el 0,7% anual de presupuesto a un tema social, ¿a qué se ha dedicado este año?
—En principio la idea era ayudar a compañeros colegiados que tenían una actividad fuera de españa de cooperación de índole sanitario, pero también lo hemos destinado a comedores sociales de Cádiz, a Cáritas, etc.
—¿Qué actividades tenéis previstas para los próximos meses?
—Ahora en verano baja la actividad, pero siempre le hemos dado una importancia primordial a la formación. De hecho vamos a ampliar las actividades formativas para cubrir más áreas de la medicina.
—Habrá medicos que estén pasando por una mala situación económica.
—Cuando se habla de los médicos la gente piensa que son personas que ganan mucho y que tienen la vida resuelta, y nada más lejos de la realidad. La inmensa mayoría vive con un sueldecito ajustado y llegan a fin de mes con dificultad.
