Los combates en el noreste del Líbano desde el sábado entre yihadistas y el Ejército han causado hasta ahora al menos 15 muertos y más de 45 heridos en las filas castrenses, dijeron hoy a Efe fuentes militares.
"Los enfrentamientos continúan de forma continua y el Ejército está decidido a proseguir la batalla hasta la expulsión de los extremistas", explicó una fuente, que pidió el anonimato.
Entre las víctimas mortales figura un coronel, según había anunciado un poco antes el ejército en un comunicado.
Los choques comenzaron el sábado por la tarde después de la detención de Amer Ahmad Yoma, un responsable del Frente al Nusra (rama siria de Al Qaeda), en la región de Arsal, colindante con Siria.
Sin embargo el jefe del Ejército libanés, Jean Kajwayi, ha negado que ese hecho fuese el detonante del ataque contra sus fuerzas.
"Este ataque terrorista no se debe al azar o a la casualidad, fue planificado hace mucho tiempo y solo se esperaba el momento oportuno", afirmó, y señaló que participan extremistas de varias nacionalidades, así como algunos que viven en los improvisados campos de refugiados sirios de la región de Arsal.
En una declaración al periódico "L'Orient-Le Jour", el viceprimer ministro y ministro de Defensa, Samir Mokbel, afirmó que unos 2.500 yihadistas participan en la batalla contra el Ejército, aunque este "tiene la situación controlada".
Según medios locales, el Ejército está decidido a terminar la batalla en Arsal en las próximas 48 horas.
