La Junta de Portavoces del Parlamento andaluz áprobó ayer por unanimidad la ordenación del pleno de investidura como presidente de la Junta del socialista José Antonio Griñán que se celebrará los próximos 21 y 22 de abril, un debate que la presidenta de la Cámara, Fuensanta Coves, deseó que sea "fructífero".
La sesión plenaria comenzará el martes 21 a las 12,00 horas con la promesa o juramento de Dolores Cañero como diputada autonómica en sustitución del ex presidente de la Junta Manuel Chaves, quien renunció a su escaño para marcharse al Gobierno central como vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial.
A continuación, Griñán dará su discurso de investidura por un tiempo ilimitado en el que tendrá la oportunidad de dar a conocer las líneas del programa con el que pide el respaldo de la Cámara.
Cuando finalice la intervención del candidato a la Presidencia de la Junta la sesión plenaria se interrumpirá hasta el día siguiente, 22 de abril.
Está previsto que esta sesión comience a las 10,00 horas con la intervención de los portavoces de los grupos parlamentarios -IU, PP y PSOE- de menor a mayor, aunque Coves se comrpometió a ser "flexible" con la duración de los tiempos.
Los portavoces de los grupos parlamentarios dispondrán en una primera intervención de 30 minutos cada uno y de diez minutos en una segunda, y el candidato tiene la oportunidad de responder a estos turnos y será siempre el que cierre los mismos, tras lo cual se procederá a la votación, en la que Griñán tiene asegurada la elección gracias a la mayoría con la que cuenta el PSOE en la Cámara autonómica.
La polémica de las dos candidaturas
Durante la reunión de la Junta de Portavoces el portavoz del PSOE-A, Manuel Gracia, y la del PP-A, Esperanza Oña, continuó con la polémica suscitada el miércoles sobre si era o no posible que el debate de investidura pudiera contar con más de un candidato ante la intención del PP de presentar a Javier Arenas.
En su intervención, Esperanza Oña precisó que la intención de su grupo era dejar claro que el candidato de su partido era Javier Arenas y que no podían votar a favor de Griñán, por lo que quizá se malinterpretara la intención de su partido que en ningún momento fue la de ir contra el Reglamento y el Estatuto.
La dirigente popular aprovechó para criticar la reacción que tuvo el portavoz socialista, Manuel Gracia, tras conocer las intenciones del PP, y le preguntó si el objetivo socialista era el de "imponer" a los populares que votaran a favor de Griñán durante el debate de investidura.
Lamentó que Gracia acusase al PP de querer romper las reglas del juego cuando lo que pedía era plantear la posibilidad de que hubiese un "fundamento reglamentario" que lo permitiera, al tiempo que acusó al portavoz socialista de querer haber "méritos" ante su partido en el futuro reparto de consejerías.
La respuesta de Gracia fue la de agradecer a la portavoz del PP que hubiera "rectificado" su posición y añadió que si lo que pretendía este partido es que el debate de investidura contase con dos candidatos lo que estaba demostrando era una "ignorancia supina" del reglamento y el Estatuto "saltándose las reglas".
Solo se ha tratado, a juicio del portavoz socialista, de una "frivolidad y una ocurrencia" por parte del presidente del PP-A, Javier Arenas, con el objetivo de "buscar el impacto de unos titulares" en los medios de comunicación.
Por su parte, Diego Valderas no entró en esta polémica y se limitó a pedir a la presidenta de la Cámara "flexibilidad" a la hora de medir los tiempos durante el debate, ya que ante la ausencia de un debate sobre el Estado de la Comunidad, resulta necesario que los grupos se posicionen sobre la situación de Andalucía.
