La noche de San Juan cumplió con su tradición en Algeciras, donde miles de personas acudieron a ver arder las hogueras, disfrutar de un baño nocturno e incluso cenar en la playa.
El fuego una vez más ejerció de purificador en una noche que tiene algo de ceremonial catárquico para aquellos que dan la bienvenida al verano ante las hogueras.
Desde los más pequeños, que disfrutaron del espectáculo, hasta aquellos que cumplen con rituales casi esotéricos en busca de suerte y de una renovación espiritual la noce más corta del año, fueron miles los que concedieron a esta noche un carácter especial.
Estudiantes que terminan el curso y queman parte de los apuntes para pasar página es una de las imágenes habituales que se repitió, así como otras, con otro carácter, pero con el mismo objetivo de abrir una nueva etapa con la llegada del verano.
En Algeciras no se registraron incidencias destacadas en una noche que se saldó con orden y sin problemas.