El regatista español Liam Whalley, nuevo campeón del mundo de 'kitesurf' (tabla con cometa) en la modalidad de estilo libre masculino, ha manifestado sentirse "feliz" al haber podido lograr su "sueño".
La edición 2015 del Mundial ha sido atípica, al anular la organización del Campeonato del Mundo cuatro de las nueve pruebas previstas, de ellas las tres últimas -Argentina, China y Sudáfrica-, que no se han disputado finalmente junto a la anterior cita de Brasil.
Whalley ha sumado 3.710 puntos en las pruebas celebradas esta temporada, por delante del el brasileño Carlos Mario (3.440) y el británico Aaron Hadlow, tercero con 3.350.
El regatista ibicenco afincado en Tarifa se ha proclamado campeón después de obtener dos triunfos, en Marruecos y Venezuela, un segundo puesto en Alemania y un tercero en la propia localidad gaditana.
En declaraciones difundidas por su equipo, ha sentido como una "pena acabar la temporada así", ya que le habría "gustado celebrarlo con un podio" en la playa en plena competición.
Whalley ha lamentado no poder "celebrar" el título mundial "en el agua" y ha aventurado "poder hacerlo en 2016", edición en la que defenderá el galardón mundial masculino.
El deportista sufrió una dolencia en la tibia izquierda antes de la prueba de Tarifa que no le permitió "competir al cien por cien", aunque "con dolores" finalizó tercero.
Whalley subió al podio en la prueba de 'casa' y descartó participar en Fuerteventura (Canarias) para recuperarse y mantener su liderato.
En la siguiente cita disputada a finales de agosto en Alemania -a la postre, la última celebrada- la tibia "no estaba del todo recuperada" pero pudo lograr la segunda plaza y mantener el liderato.
El regatista ha manifestado que "ésa fue probablemente la prueba más dura" de su vida, al sentir "toda la presión", ha revelado.
