La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha pedido la puesta en libertad de los dos titiriteros acusados de un delito de enaltecimiento del terrorismo después de que mostraran un cartel con el texto 'Gora Alka-ETA' en la representación infantil que realizaron este viernes en Madrid dentro de la programación municipal del Carnaval 2016.
En un mensaje en su cuenta de Twitter y en otro más extenso en Facebook, Colau ha reconocido que la función "no era para niños" y que puede ser que fuera de mal gusto, pero ha señalado que, a su juicio, no se trata de un delito.
Ha pedido a los ciudadanos que se pusieran en la piel de los titiriteros, y ha señalado que los dos actores tendrán que lidiar con "la maquinaria mediática sin escrúpulos de la derecha vengativa que no soporta la disidencia y aún menos perder elecciones, y que sigue recurriendo machaconamente al 'todo es ETA'".
Colau ha señalado que es posible que la obra satírica y carnavalesca fuera de mal gusto y que no fuera apropiada para niños, y ha aseverado que "como máximo" se trata de un error de programación, tras lo que ha destacado que el responsable ya ha sido destituido.
"Una torpeza no es un delito. La sátira no es un delito. En una democracia sana, en un estado de derecho, hay que proteger toda libertad de expresión, hasta la que no nos guste, hasta la que nos moleste", ha expresado la alcaldesa.
Los dos acusados son miembros de la compañía Títeres desde Abajo, que representaron en Tetuán el viernes por la tarde la obra 'La bruja y don Cristóbal', programada por el Ayuntamiento de Madrid, en la que mostraron el ahorcamiento de un juez, el apuñalamiento de una monja, y un cartel de 'Gora Alka-ETA'. Los padres asistentes avisaron a la Policía, que detuvo a ambos titiriteros.