La Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla aprobará el jueves en su consejo de gobierno, la caducidad del expediente destinado a rescindir el contrato adjudicado a Vías y Construcciones, por 3,26 millones de euros, para la construcción de dos bloques de viviendas sociales de nueva planta, en sustitución de los dos edificios municipales de viviendas demolidos en el barrio de Los Pajaritos, sometido a una operación de regeneración urbana. En paralelo, se fijará un plazo de 15 días naturales para que la empresa emprenda las obras de construcción.
Como ha adelantado El Correo de Andalucía, después de que el pasado mes de diciembre la Gerencia de Urbanismo iniciase el citado expediente de rescisión contractual, que se sustentaba en que transcurridos cinco meses desde la firma del contrato no habían comenzado las obras, un informe de la Secretaría General ha motivado un nuevo giro en el asunto. El informe, recogido por Europa Press, señala que "no consta que los pliegos o el contrato incorporen plazos parciales de obligado cumplimiento para el contratista", ni "que el cumplimiento de esos hipotéticos plazos se haya articulado como una obligación esencial cuyo incumplimiento determina la resolución del contrato".
PLAZO DE 15 DÍAS NATURALES
Tampoco consta, según dicho informe, "ningún informe técnico que acredite la imposibilidad de cumplir el contrato en el plazo que quedaba cuando se inicia el procedimiento de resolución". Dado el caso, el próximo consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo tratará una propuesta de acuerdo, recogida por Europa Press, para "declarar la caducidad" del expediente de resolución de contrato en cuestión, archivar el expediente de resolución tramitado como "pieza separada segunda" y "requerir al contratista para el comienzo de las obras en 15 días naturales" a partir de la notificación de la formalización de dicho acuerdo.
Hablamos de la operación de regeneración urbana promovida por el Ayuntamiento de Sevilla, para derribar las 524 viviendas sociales municipales del barrio de Los Pajaritos y sustituir tales inmuebles por bloques de viviendas de nueva construcción.
En agosto de 2014, recordémoslo, comenzaron los primeros trabajos de derribo de los antiguos bloques, después de que el Ayuntamiento hispalense aprobase y adjudicase la demolición de las manzanas números 8 y 9 de Los Pajaritos, que sumaban un total de 96 viviendas. Los derribos estaban precedidos por una operación previa para realojar a las familias que habitaban las viviendas demolidas entonces y que serán sustituidas por 62 nuevas viviendas en las calles Estornino y Gavilán.
REALOJOS PROVISIONALES
Concretamente, 66 de las familias que residían en estas viviendas sociales ya demolidas fueron realojadas de modo transitorio en el "edificio puente" construido por la Empresa Municipal de Vivienda, Suelo y Equipamiento de Sevilla (Emvisesa) en la avenida de Andalucía, junto a la avenida de Parque Amate; mientras nueve están reubicadas en Torreblanca, dos en el barrio de Aeropuerto Viejo y el resto en la promoción de viviendas públicas de Nuevo Amate, fruto de la demolición y reconstrucción de los antiguos bloques de viviendas de Regiones Devastadas.
Lo cierto es que después de derribar los dos primeros bloques de vivienda, la Gerencia de Urbanismo aprobó emprender la contratación de las obras de construcción de los dos bloques de viviendas municipales destinados a sustituir a los edificios ya derribados. El presupuesto base de licitación de las obras fue de 5.251.347 euros, IVA incluido, tras lo cual el 1 de junio de 2015, el citado contrato fue adjudicado a Vías y Construcciones S.A., por 3.261.611 euros. A tal efecto, la Gerencia de Urbanismo y la empresa adjudicataria firmaron el contrato en cuestión el 15 de julio, al objeto de que los trabajos arrancasen como muy tarde el 14 de septiembre.
Pero dado que cinco meses después de la firma del contrato la empresa adjudicataria no había iniciado los trabajos de edificación de estos dos nuevos bloques, que sumarían un total de 62 viviendas, e incluso habría planteado una reformulación al alza de los costes del contrato alegando aspectos técnicos, la Gerencia de Urbanismo acordó emprender el procedimiento habilitado para rescindir el contrato.