El Ayuntamiento ha velado este verano por el cumplimento de la Ordenanza de Venta Ambulante que regula los distintos mercadillos instalados en diversos puntos de la ciudad durante la época estival, con el fin de que los vendedores instalados en los mismos se ajusten a la norma establecida ofreciendo un servicio de calidad a portuenses y visitantes.
Para ello, la Policía Local ha efectuado varios controles e inspecciones que han dado como resultado el levantamiento de una veintena de actas por irregularidades detectadas.
Así, tras las actuaciones de control realizadas por los agentes municipales durante el mes de agosto, se han detectado algunas irregularidades en el Mercadillo del Parque Calderón, ya que había algunos casos de vendedores que no cumplían con las normas establecidas.
En concreto, y como se ha informado desde el Área de Comercio, las actuaciones han ido dirigidas a comprobar la ocupación de la vía pública anexa a las casetas, ya que en alguna ocasión se había comprobado que el público encontraba dificultades para pasear como consecuencia de una abusiva exposición de productos fuera de las casetas, así como la existencia al frente de las mismas de personas distintas del titular autorizado.
En total, han sido 20 las actas levantadas por la Policía Local, la mayoría de ellas por la referida ocupación abusiva del espacio anexo a la caseta, o por ocupar el paseo peatonal con mercancías impidiendo el paso de personas.
Asimismo, un total de cinco de ellas han sido levantadas por estar al frente de la caseta una persona distinta de su titular, sin acreditar la relación laboral o familiar con el titular autorizado.
Hay que reseñar que a todas estas personas se les ha notificado un requerimiento para que cumplan las normas establecidas en la Ordenanza de Venta Ambulante, haciéndoles saber que si continúan llevando a cabo estas acciones, serán objeto de expediente sancionador que podrá conllevar la imposición de sanciones de hasta 3.000 euros, e incluso la retirada definitiva de la autorización por infracción grave a la citada Ordenanza Municipal.
El edil de Comercio, Ángel Quintana, ha querido aclarar, no obstante, que en la mayoría de los casos los vendedores han tenido un comportamiento ejemplar y han cumplido con las normas municipales.