“Pensamos en el Foro Social que quizás el principal problema que tenemos en España, y también en El Puerto, sea la injusta distribución de la riqueza y la bochornosa desigualdad que nos envuelve. Hace unas semanas conocíamos un dato realmente alarmante: durante la crisis, la diferencia entre el 10% más rico y el 10% más pobre había aumentado en más de un 13%. Los que gobiernan, fijándose en el 10% más rico, afirman sin pudor que la situación de España está mejorando. Sin embargo, nada dicen de que esa mejoría se la apropian los que ya viven muy bien, a costa del creciente empobrecimiento y, por tanto, de la angustia y desesperación de millones de personas que, por mucho que lo intenten, no son capaces de cubrir sus necesidades básicas: alimentación, agua, luz, alquiler…”
“Un ejemplo de dónde suelen poner el punto de mira nuestros gobernantes, al analizar la realidad, son las recientes declaraciones de nuestro alcalde, David de la Encina, afirmando que este verano ha sido muy bueno para El Puerto. Desde el Foro, solamente le pediríamos que en su análisis incluyera los sectores o familias para los cuales ha sido un verano muy bueno. ¿Se refiere a las familias que llevan varios meses esperando las ayudas de Bienestar Social para que no les corten el agua o la luz? ¿O quizás piensa en las personas que han perdido sus casas a manos de los bancos y están mendigando un alquiler o un techo donde cobijarse? ¿Tiene en mente en esa afirmación a todas las personas que comen diariamente gracias a las pensiones de sus mayores o a los comedores sociales? ¿A los jóvenes que trabajan 12 horas diarias en la hostelería, con salarios de miseria y cotizando por 2 o 3 horas? Que cierto es que todo se ve según el dolor con que se mira”.
“La mayoría de los políticos que tocan algo de poder comienzan, poco a poco, a endurecer su mirada y su corazón, seleccionando los datos positivos que avalan su gestión y olvidando, o no dando prioridad, al sufrimiento de las personas en situación desesperada y sin horizonte alguno de cambio. Como no la sufren en sus propias carnes, no les duele y terminan negando esa realidad dolorosa de una gran parte de la población”.
“Señores y señoras del equipo de Gobierno, hace algo más de un año, despertaron gran ilusión en muchos de nosotros y nosotras. Nos creímos que era posible un cambio en la forma de gobernar y de hacer política a favor de los más desprotegidos. Hoy, después del incumplimiento de puntos importantes de su programa de progreso, del atascamiento de la nueva normativa de concesión de ayudas en Bienestar Social, del estancamiento de la derogación de la normativa de convivencia, del creciente problema de vivienda en la ciudad; después de expulsar del gobierno a Levantemos por mantener su compromiso en contra de los parkings, agravando la posibilidad de un cambio real a favor de las personas más necesitadas…
Hoy, nuestra ilusión está desapareciendo y siendo sustituida por la decisión de aumentar la denuncia y la presión para que las situaciones de pobreza y exclusión se conviertan en su principal preocupación a la hora de gobernar. Todos y todas debemos contribuir a reducir las injustas desigualdades y a conseguir una vida medianamente digna para toda la población de El Puerto de Santa María”.