El Ayuntamiento de Cartaya ha aprobado por unanimidad la moción presentada por IU en el último Pleno Municipal para crear un camping ecoturista, con el objetivo de generar desarrollo socio-económico sostenible, diversificando la oferta turística, creando empleo verde y ampliando los sectores productivos locales.
Desde IU se destaca “la oportunidad del campismo ecoturista para generar desarrollo comunitario real, completando una oferta turística centrada casi estrictamente en un modelo de hoteles de alto coste y golf, y estimular la creación de empresas vinculadas al turismo activo”.
Nuestros extensos espacios naturales de altísimo valor ecológico ofrecen una oportunidad extraordinaria para el desarrollo del campismo ecoturista. Con casi 12.000 hectáreas de pinar y parajes naturales como la Flecha de El Rompido y Marismas del río Piedras, nuestra tierra ofrece una oportunidad única para desarrollar un turismo orientado al disfrute activo de la naturaleza y la cultura locales, mediante actuaciones de promoción de las tradiciones, costumbres, gastronomía y medio natural, en cooperación con la comunidad y con un mínimo impacto sobre los recursos.
Los campistas suelen integrarse en las comunidades locales, mostrando una satisfacción y fidelidad al destino muy superior a otro tipo de turistas. En Andalucía, casi nueve de cada diez campistas repite su experiencia y realiza, como media, cinco acampadas anuales en la región, lo que refuerza nuestra imagen turística.
Valoramos muy positivamente la aprobación unánime de esta moción en Pleno municipal, que se suma a la aprobación de otras mociones de IU como la declaración de Cartaya como municipio turístico, el plan de dinamización del mercado de abastos, el entoldado del casco urbano, la mejora del servicio eléctrico, seguridad vial e instalaciones deportivas de El Rompido, la habilitación de rampas públicas de varado y la disolución de la Entidad de Conservación y mejora de los servicios públicos en Nuevo Portil.
Continuamos apostando por una oposición fuerte basada en la crítica constructiva para el impulso de políticas que, partiendo de nuestros recursos naturales y culturales, generen empleo y calidad de vida, acciones políticas reales que mejoren la vida de las personas.
