El partido 3r ha pregubtado a la alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, a través del Registro Oficial del Ayuntamiento, por la situación de las obras que se están realizando en el palacio consistorial y la falta de noticias sobre las mismas.
La falta de noticias puede ser una buena noticia, pero no tanto cuando en el mes de junio el arquitecto del proyecto, Francisco Márquez, manifestaba que estaban saliendo a la luz problemas arquitectónicos con los que no se contaba debido a las actuaciones realizadas años antes, incluso decenios, en un edificio que se ha ido adaptando a las necesidades y que ha tenido que ser reforzado en varias ocasiones.
La preocupación de 3R no es sólo por el devenir de la obra, sino también por si las incertidumbres aparecidas van a generar algún modificado o complementario del proyecto original, cuál sería el importe de los mismos y cuál es la fórmula que va a utilizar Gobierno local para absorber esos incrementos presupuestarios. Y esas preguntas se hacen porque "ya ha transcurrido tiempo más que razonable para su estudio y valoración".
"Entendemos desde este partido político, que el equipo de gobierno no está siendo corresponsable con sus proclamas de transparencia, máxime en estas obras, por aquello de lo que supone para la ciudadanía y por ser posiblemente el contrato público de mayor cuantía en la historia reciente de esta ciudad y que se encuentra fuera del control ciudadano".
Además llueve sobre mojada por cuanto la ciudadanía tuvo que asistir al “espectáculo” de tardar 350 días desde que se licitaron las obras hasta el comienzo de las mismas, a unos intolerables niveles de opacidad durante el proceso de adjudicación de las obras, incluso incumpliendo las disposiciones legales al efecto y ahora nos preguntamos si estaremos en una nueva entrega de “tinieblas informativas” de lo que está ocurriendo en el desarrollo de esas obras, que hasta para no saber, no sabemos, si se le está dando cumplimiento a la planificación de los tiempos previstos".
3R recuerda que el acta de replanteo de las obras fue firmada el pasado 14 de marzo, es decir, "llevaríamos el próximo 15 de noviembre, 8 meses de obras y véase…"
Por todo ello le exigen a la alcaldesa, que “baje al ágora” y explica a la ciudadanía el grado de cumplimiento de las obras, con las previsiones acordadas con la adjudicataria, temporales, en su faceta económica, en la posible aparición de desviaciones, posibles inconvenientes en la ejecución de las obras y cuantos detalles considere de interés para el debido control ciudadano, harto normal en cualquier proyecto público y fundamental, en este caso, tratándose de la Casa Consistorial, de todos los isleños.
