Tras una mala primera parte, el Cádiz se desmelenó y supo sacar partido de la superioridad numérica que disfrutó desde el minuto 48 para golear a un Alcorcón que, siendo justos, no mereció un castigo tan grande (4-1).
Por segunda semana consecutiva, Álvaro Cervera optó por situar en ataque a Ortuño y Güiza, aunque fue la salida del jerezano y la entrada de Abdullah lo que revolucionó un partido que parecía encallarse en la primera parte.
Con malas noticias arrancó la tarde, ya que Aridane no pudo jugar al sufrir una gastroenteritis. De esta forma, su lugar en el equipo lo ocupó Migue, que formó pareja de centrales con Sankaré.
Precisamente Migue tendría un papel importante, aunque involuntario, en el gol que abría el marcador nada más comenzar el encuentro. Un remate flojo de los visitantes tocó en el defensa cadista y el balón fue a parar a la red sin que Cifuentes pudiera alcanzarlo aunque entró con parsimonia.
Había sido un comienzo tonto del Cádiz, que poco a poco intentó hacerse con el dominio del encuentro, pero no era su tarde. Errores no forzados, centros malos y desajustes eran la nota predominante por parte de los locales, que llegaban al partido con la tranquilidad que aportaban los últimos resultados.
El problema es que no solo no llegaban oportunidades para el empate, sino que casi se encajó el 0-2. A balón parado, Navarro remató a bocajarro, pero Cifuentes apareció para salvar el segundo tanto.
Los amarillos no tenían control ninguno en el centro del campo, así que Cervera se la jugó en el descanso. Dejó en la caseta a Güiza para dar entrada a Abdullah, que actuaría algo más adelantado de lo que es habitual en él.
Y salió bien la apuesta porque uno de los primeros balones que tocó el recién ingresado en el terreno fue para dejar a Ortuño encarando la portería rival. El delantero cadista, con el balón controlado, fue derribado por Rafa Páez y el árbitro expulsó al central del equipo madrileño con casi toda la segunda parte por jugar.
Con uno más, los amarillos se volcaron en busca del empate y este no tardaría en llegar. Sankaré envió un balón largo que puso en problemas a Toribio, mediocentro ubicado como central tras la expulsión, que perdió la partida ante Ortuño. El goleador cadista se llevó la bola, regateó a Dimitrovic e hico el 1-1.
Lejos de conformarse, el Cádiz buscó de inmediato asestar un segundo golpe a su rival, muy tocado moralmente tras la tarjeta roja y el tanto del empate.
Las ocasiones iban llegando, pero entre la mala puntería y el acierto de Dimitrovic entre los tres palos visitantes parecía imposible remontar sin sufrimiento máximo.
Hasta que Aitor dijo “esta es la mía”. El extremo recogió un pase de Garrido que al no ser bueno le obligó a regatear forzado para no perder el balón, pero enseguida le salió al paso otro rival, del que se marchó con facilidad. Y ahí, fuera del área, levantó la vista y disparó a la escuadra. Golazo, ovación y el resto del equipo con las manos en la cabeza sorprendidos por completo.
A partir de ahí, el Alcorcón fue un muñeco de trapo en manos de un equipo que, aunque sufrió unos minutos y la gente recordaba la pifia final ante el Numancia, supo cerrar el partido a lo grande.
Un defensa visitante marcó sin querer el 3-1 al rebotarle el balón tras el despeje de Dimitrovic a un lanzamiento de Ortuño desde la línea de fondo. Era el 3-1 tranquilizador en el minuto 90 y lejos quedaba ya lo sucedido contra el UCAM Murcia, que se llevó un empate del Carranza tras ir perdiendo 2-0 hasta el minuto ochenta de partido.
Pero no quedaba ahí la cosa porque Ortuño, ya en el tiempo extra, iba a marcar de cabeza el cuarto tanto del equipo y el segundo de su cuenta particular en un partido que tuvo una pésima primera parte, pero que se rompió a favor de los locales tras la expulsión de un central visitante.
Este resultado sitúa al Cádiz en una octava posición que hace pocas semanas era utópica. Y es por ello que siguen dando rabia aquellos dos puntos perdidos ante el UCAM. Con ellos, la cuarta posición sería gaditana, pero hay que mirar adelante y este equipo tiene todavía margen de mejora pese a la buena racha de resultados en la que se encuentra inmerso.
- Ficha técnica:
4 - Cádiz: Cifuentes; Carpio, Migue, Sankaré, Luis Ruiz (Aitor, m.73); Garrido, José Mari, Álvaro, Nico (Salvi, m.51); Güiza (Abdullah, m.46) y Ortuño.
1 - Alcorcón: Dmitrovic; Vega, David Navarro, Páez, Bellvís; Toribio, Víctor Pérez (Manolín, m.67), Martín Luque (Aguza, m.74), Pablo Pérez, Plano (Nelson, m.67); y David Rodríguez.
Goles: 0-1, M.2: Migue (p. p.); 1-1, M.55: Ortuño. 2-1, M.78: Aitor. 3-1, M.91: Navarro (p. p.). 4-1, M.92: Ortuño.
Árbitro: Prieto Iglesias (Comité Navarro). Expulsó al visitante Páez (m.47), por derribar a Ortuño cuando encaraba solo al portero del Alcorcón. Además, amonestó a los locales José Mari y Luis Ruiz.
Incidencias: Partido de la decimoquinta jornada de LaLiga 1/2/3, disputado en el estadio Ramón de Carranza ante unos 10.000 espectadores. Terreno de juego irregular.
