El alcalde de Chiclana, José María Román, y la presidenta de la Asociación de Caridad San Vicente de Paúl, Mónica Ballesteros, han firmado este mediodía un convenio de colaboración, a través del cual el Ayuntamiento de Chiclana se compromete a colaborar en el mantenimiento de la casa de acogida que dicho colectivo social tiene en la calle Botica y que actualmente cuenta con cinco personas mayores. En este sentido, con el objetivo de atender las necesidades de la asociación, el Consistorio aportará la cantidad de 9.501,30 euros para los gastos ocasionados en el presente año 2018.
De esta forma, el equipo de Gobierno continúa su labor en apoyo a los asuntos sociales de la localidad y, en especial, a la protección de la tercera edad, que refleja el trabajo de la Asociación de Caridad San Vicente de Paúl con estas siete personas. Además, colabora con un colectivo que cuenta con escasos recursos económicos para el mantenimiento de su casa de acogida, así como para la atención de estas personas mayores.
En este sentido, el alcalde de la ciudad ha destacado que “desde hace años tenemos un acuerdo de colaboración con esta asociación para el mantenimiento de una casa de acogida para señoras mayores, que necesitan un cuidado por parte de las voluntarias”. “Además, estamos hablando de una casa en pleno centro urbano, lo que le permite a estas mujeres poder pasear por esta zona y estar con sus seres queridos”, ha indicado José María Román, quien ha añadido que “nosotros solo ponemos el dinero, pero las voluntarias son las que ponen el alma, el cariño y el amor”.
Por su parte, Mónica Ballesteros ha agradecido al alcalde que “podamos contar con esta ayuda, que es imprescindible para que podamos mantener esta casa, ya que sin ella sería imposible”. “Y agradecer al pueblo de Chiclana y a algunas entidades, que también colaboran con nosotros”, ha comentado la responsable de la Asociación San Vicente de Paúl, quien ha puesto como ejemplo al gerente de un bar en el polígono El Torno, “que a lo largo del año reúne monedas en una garrafa de agua que pone en el mostrador y nos la entrega”.
Asimismo, Ballesteros ha indicado que “actualmente contamos con sitio para atender a alguna persona más. Por tanto, si alguien conoce a alguna mujer mayor que pueda estar con nosotras, que nos llame y le informamos de qué tipo de persona puede entrar”.
