El cabeza de la lista al Congreso del PSOE por la provincia, Fernando Grade-Marlaska junto a la secretaria general, Irene García, ha centrado esta mañana su agenda de campaña en los agentes económicos y sociales de la provincia, tras sendas reuniones con representantes de los empresarios en la sede de la CEC y visitar también las instalaciones de las centrales sindicales de UGT y CCOO.
“Algo que no es excepcional o un acto que responda solo a que estamos en campaña”, ha puntualizado el candidato socialista, que asegura que “la concertación social es una seña de identidad del PSOE en su concepto de gobernanza y un factor clave para poder crear un clima favorable al crecimiento económico en la provincia”.
Grande-Marlaska ha reconocido que “esta no es una provincia fácil en materia de empleo, es la provincia que pone a prueba a todos los gobiernos en el reto de sacarla del ranking de las que tienen más paro de toda España” y en ese sentido, ha asegurado que “en estos días que la recorro, uno hace su propio diagnóstico en base a las necesidades que expresan los distintos sectores y se palpa que la provincia arrastra una situación larvada de desatención durante los últimos años en que le ha faltado una mirada especial desde Madrid”.
El número uno al Congreso ha destacado que “en siete años la provincia de Cádiz ha sido castigada, injustamente agraviada en sus sectores más potentes y ha citado algunos de ellos como el corredor ferroviario Algeciras-Bobadilla y el impulso a los puertos, unos astilleros que languidecían y que hoy tienen un plan Estratégico de cuatro años consensuado con los sindicatos, unos planes de Reindustrialización que suponían un acicate para las empresas con condiciones leoninas para acceder a las ayudas y por tanto, quedaban sin ejecutarse, una pesca en incertidumbre constante y donde sabiendo que se acababa el acuerdo de pesca con Marruecos no estaban preparadas las ayudas”. “Viendo lo que los distintos sectores me trasladan no entiendo cómo los gaditanos habéis podido aguantar que se os dieran la espalda en ese sentido”, ha apostillado.
Entiende Grande-Marlaska que las administraciones pueden cada una en la medida de sus posibilidades articular medidas de incentivación del mercado laboral, “pero sabemos que el empleo lo crean también en su inmensa mayoría las empresas”. Fortalecer el tejido empresarial, reordenar los suelos productivos, relanzar una Zona Franca saneada y sobre todo, hacer que se cumpla íntegramente la Iniciativa Territorial Integrada (ITI), son algunas de las cuestiones básicas que el PSOE pone encima de la mesa en estos días en que se debaten modelos, ha explicado y por eso, ha insistido en la importancia de ejecutar al cien por cien la ITI, porque es decisivo, a su juicio, que se plasmen en proyectos no solo los 387 millones correspondientes a la Junta, sino también los 900 millones del Gobierno central, “que todavía no los hemos encontrado”.
“Nos hemos comprometido con otras medidas, además del Plan de astilleros, en los PGE dotábamos a la provincia de las infraestructuras” ha asegurado precisando que “política social también es política económica”, y ha ido enumerando algunas de las medidas del Gobierno socialista como el subsidio a los parados de larga duración mayores de 52 años, retomar las cotizaciones de las cuidadoras no profesionales, preocuparnos del Brexit para que los 9.000 trabajadores que cruzan a Gibraltar no se vean afectados por un hipotético Brexit duro, donde hay que recordar que el PP votó en contra de ese decreto social que no consideraba urgente, o la estiba con 2.000 familias que han visto resuelto su problema”. “Es un Gobierno que mira a Cadiz a la cara, estamos en ello y ya hemos fijado un rumbo”, ha abundado de cara al 28-A.