SALUD El agua nos acompaña en nuestras vidas todo el año, pero en verano tiene que estar más presente que nunca. La importancia de una correcta hidratación toma aún mayor importancia con la subida de las temperaturas.
VERANO Con la llegada del calor llegan también, una vez más, algunos riesgos añadidos para nuestra salud.
RIESGOS Los niños y las personas mayores son quienes deben prestar un mayor cuidado con respecto al consumo de agua.
INFLUENCIA Una hidratación deficiente afecta a nuestra salud y a nuestro estado emocional.
La importancia de una correcta hidratación toma aún mayor importancia con la subida de las temperaturas.
Como cada verano, llega el calor y con él algunos riesgos añadidos para nuestra salud. Niños y mayores son quienes deben prestar un mayor cuidado, pero las personas jóvenes también tienen que hidratarse para no sufrir los perjuicios de las altas temperaturas.
¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE EL AGUA?
Más del 60% de nuestro cuerpo es agua. Ésta es responsable del transporte de nutrientes a las células, ayuda a regular la temperatura corporal, compone fluidos lubricantes para las articulaciones y ayuda a eliminar desechos del organismo, entre otras muchas funciones.
Tomar la cantidad adecuada de agua aumenta el rendimiento físico y mental. Por el contrario, consumir menos de la necesaria afecta a la productividad, a la salud y a nuestro estado emocional.
CONSEJOS PARA AFRONTAR LAS ALTAS TEMPERATURAS VERANIEGAS
¿Qué debo hacer entonces? ¿Cuánta agua debo beber? ¿Cómo puedo evitar la deshidratación? A continuación, presentamos algunos consejos sencillos ofrecidos por Aguas de Huelva:
- Consume entre 2 y 3 litros de líquidos al día, incluyendo los que provienen de los propios alimentos. El agua se bebe y también se come. Ahora más que nunca come frutas y verduras.
- No esperes a tener sed, la sed es señal de que la deshidratación ya ha comenzado.
- Ten siempre una jarra con agua fresca en el frigorífico, sobre todo para los días de más calor.
- Si puedes, evita salir a la calle a las horas de más calor y, sobre todo, hacer ejercicio en las horas centrales del día o ponerte un excesivo tiempo bajo el sol.
- Si estás en el parque con los niños y hace calor prueba a mojarles de vez en cuando la cabeza, seguro que tienes una fuente cerca.
- Los síntomas que pueden indicar que sufres un cuadro de deshidratación son: sed, sequedad de la piel y las mucosas, disminución de la cantidad de orina, dolor de cabeza o incluso, en los casos más extremos, somnolencia y fatiga extrema. Presta atención si sufres estos síntomas e hidrátate.
- Si vas a hacer ejercicio lleva un recipiente con agua u otra bebida y bebe antes, durante y después del ejercicio, ya que el deporte produce la eliminación de cierta cantidad de agua y sales minerales.
- COME AGUA: Además de las bebidas, algunos alimentos como las frutas y verduras son muy hidratantes.
- Si disfrutas de una comida abundante, recuerda que es necesario consumir más agua.
- Las bebidas alcohólicas no mejoran la hidratación.