Que Castellana Properties, la nueva propietaria de Bahía Sur, publicite como una de las ventajas de su llegada a San Fernando que va a crear más de 200 puestos de trabajo puede ser verdad, aunque hay que esperar al final.
Y que diga que para la reconstrucción de las nuevas tiendas donde estaba El Corte Inglés va a emplear a 300 personas, también puede ser verdad, pero habría que ver dónde viven esos trabajadores con empleo hasta final de obras.
En San Fernando hay mucha experiencia con eso de que las obras las realicen empresas de fuera, aunque no está este periódico por asegurar en todo o en parte este asunto polémico en tantos proyectos ya ejecutados.
No obstante y sólo en ese punto, la publicidad de Castellana puede ser correcta pero no hay que olvidar que para crear los más de 200 puestos de trabajo -sin contar los de la obra- se han tenido que destruir o trasladar otros más de 200 puestos de trabajo, los de El Corte Inglés.
A eso hay que añadir para mal los empleos que están en peligro en la ciudad por la llegada de nuevos cines a Bahía Sur y en lo que no quieren caer algunos, el daño que se le podría -en condicional- hacer a la hostelería de la ciudad con los nuevos centros comerciales dirigidos tanto a ese subsector como al comercio más variado. Después volvemos al condicional.
La estrategia de la socimi madrileña, pues, no sería más que un engañabobos si se hacen las operaciones matemáticas oportunas, aunque como en cualquier estrategia como la actual, no faltarán los bobos que se la traguen.
Se podría pensar que el cierre de El Corte Inglés, en buena parte, beneficiaría a las pequeñas tiendas del complejo que venden ropa -que vendía El Corte Inglés-; que venden bolsos -que vendía El Corte Inglés-; que venden cosméticos -que vendía El Corte Inglés...
Eso ha hecho que no se haya levantado polvareda alguna por parte de los empresarios que están asentados en el centro comercial, que pagan unos alquileres desorbitados y que por la forma de actuar de Castellana, están llamados a subir (los alquileres). Pero como se han quitado una competencia de encima...
Sin embargo hay dos cuestiones de mucho calado que son las que van a invertir la situación y convertir el centro comercial en algo que no ha sido durante los 27 años desde su apertura.
La salida de El Corte Inglés es desde luego la salida de una competencia bestial, por las facilidades de pago que ofrece -en Cádiz u online- y por las ofertas durante todo el año, aunque ahora hay que esperar a conocer las nuevas firmas que lleguen y la forma de operar que tienen porque lo mismo algunos echan de menos la competencia de El Corte Inglés.
Firmas baratas
La gente en San Fernando y en la Bahía se volvería loca si Castellana Properties trae un Primark a Bahía Sur, pero un Primark o muchas de esas marcas que están copando los mercados dejan en pañales la competencia que hacía El Corte Inglés a los pequeños establecimientos.
Ya hay tiendas de outlet que están haciendo estragos tanto en el comercio del propio centro como en el comercio local por sus precios inalcanzables para las tiendas de San Fernando ciudad y por ahí va la deriva que se avecina.
Pero es que la salida de El Corte Inglés -y ahora sí que sale el toro que tienen que lidiar los pequeños de dentro y los pequeños de fuera- se lleva consigo una clientela de más alto poder adquisitivo que la que traen ya y seguirán trayendo las tiendas baratas. Y ahí es donde hay que retomar el condicional aplicado a la hostelería unos párrafos más atrás.
La clientela de El Corte Inglés -aun a costa de ser clasista- era la que tras las compras en los grandes almacenes, generalmente los fines de semana y festivos, aprovechaban para comer en el propio complejo, dando vida a la hostelería que hay ahora y que ya sienten los estragos de la marcha de la firma española.
La forma de comprar, sosegada y familiar, además, beneficiaba a las tiendas pequeñas que servían de complemento a las compras de la gran superficie.
Por contra, lo que se avecina es una situación totalmente nueva para Bahía Sur, por mucho que sea la que se impone por parte de las multinacionales que en poco tiempo acabarán con las tiendas de 50 metros cuadrados que quedan y que llevan allí desde 1992.
Una vez trasladada a Cádiz, El Puerto y Jerez la clientela de más poder adquisitivo y visto desde la cara más optimista, el modelo de Castellana Properties -que hay que verlo, pero a tenor de lo que ellos cuentan- va a venir de perla a una ciudadanía de San Fernando que se debate entre el empleo precario y el paro. Por eso mismo no aguantó la firma sueca H&M y otras que se han tenido que adaptar ... en otros centros comerciales.
La clientela familiar dará paso al comprador, generalmente joven y con poco dinero en el bolsillo - a fuerza de ser clasista, pero todos hemos sido jóvenes con poco dinero en el bolsillo- que va directamente a la tienda donde venden el producto que quiere. Lo compra y se va.
El aumento de los establecimientos hosteleros, teniendo ya problemas los que hay, va a traer más a repartir mientras que la demanda funciona a menor ritmo que en los últimos años.
Todo salvo que lo que se instale sigan siendo marcas de reconocida contratación precaria en sueldo y contratos que a fin de cuentas, se viene dando en todo el centro sin que ello quite que Bahía Sur es el principal empleador de San Fernando.
La llegada de otro tipo de público al centro comercial Bahía Sur puede tener otros fectos nocivos no relacionados con la economía, sin contar lo que ya pueden contar guardias de seguridad del lugar; pero para eso siempre ha habido remedio desde la gerencia de Bahía Sur. Allí acciones punibles ni las hay ni se les espera. Ni se ven, que sería el mayor mérito.
Ya se ven en Cádiz los que se veían en La Isla
Es verdad que hablar de una caída en el número de visitantes de Bahía Sur no es totalmente comparable a la de años anteriores porque no está El Corte Inglés, pero no es menos cierto que ha bajado considerablemente desde septiembre a octubre.
Ese ‘considerablemente’, en torno a un 25% por consultas a establecimientos y a la espera de que la gerencia del centro lo desmienta con sus métodos contables más sofisticados, es lo que ya se ha llevado El Corte Inglés, santo y seña del centro comercial Bahía Sur.
Lo bueno de todo esto es que la necesidad de un segundo puente en Cádiz puso sobre aviso a la empresa española y construyó otro en la capital, donde se ve ahora a mucha gente que antes se veía en el de San Fernando.