El municipio de Bormujos ha logrado reunir casi 15.000 kilos de comida y productos de higiene y primera necesidad en cuatro días con el objetivo de entregar a las familias que peor lo están pasando en estos momentos a consecuencia de la crisis del COVID19.
Mediante la campaña “Arco Iris de la Solidaridad” se ha recogido esta numerosa muestra de generosidad, en un trabajo ímprobo por parte de unas 50 personas que, desde las 10 de la mañana hasta las 21 horas, han recorrido una a una las 450 calles de Bormujos con una animada caravana que ha sacado a las familias de sus casas para recibirla.
El alcalde de Bormujos, Francisco Molina, que ha encabezado la caravana durante su recorrido, ha expresado su “admiración por los vecinos del pueblo quienes, desde que conocieron el proyecto, reclamaron el paso de los vehículos por sus viviendas para contribuir y no han dudado ni un segundo en entregar tan ingente cantidad de alimentos”.
La campaña, organizada por las Delegaciones municipales de Obras, Fiestas y Cultura, ha desbordado desde el primer momento las previsiones del Ayuntamiento de Bormujos, que ha lanzado esta iniciativa con el fin de poner todos los artículos a disposición de Cáritas, cuya distribución se realiza en tres parroquias del municipio.
“El verdadero arco iris de la solidaridad es la generosidad del pueblo de Bormujos”
Las redes sociales han sido testigo cada día de multitud de personas que preguntaban cuándo iba a pasar la campaña por su calle. “No puedo manifestar otro sentimiento de mi pueblo que el de dar las gracias una y 15.000 veces por el valor de las personas de Bormujos. Ellos son el verdadero arco iris de la solidaridad, son la esencia de la generosidad” ha manifestado el alcalde.
Desde que comenzara el estado de alarma, provocado por la crisis sanitaria, los servicios sociales municipales han atendido muchas peticiones de familias y personas necesitadas. Este incidencia creciente, día a día, fue el punto de partida para organizar este banco de alimentos ambulante para cubrir de alimentos básicos en estas semanas de confinamiento y posteriormente.
Una diversión para los menores en su confinamiento
Los grandes camiones de Obras, adornados con globos y megafonía con música infantil, las sirenas de la Policía Local y los uniformes de Protección Civil, han formado una divertida caravana, que ha llenado de alegría la localidad durante unos días “algo que a todos nos ha hecho vivir momentos muy emocionantes, al comprobar el agradecimiento de las familias y la felicidad de los más pequeños que bailaban y aplaudían, rompiendo la monotonía de su confinamiento”, ha señalado el alcalde.
Agentes de la Policía Local, miembros de Protección Civil, operarios de Obras y voluntarios han hecho posible que, puerta a puerta, el pueblo entero pudiese participar en la “Campaña Arco Iris”, unos saliendo a su entrada, otros dejando sus bolsas y otros realizando su entrega mediante cuerdas por las ventanas. Además del alcalde, se han unido también el delegado de Cultura y Fiestas, Jesús Macarro y la delegada de Obras, Mari Carmen Garfia.
Tres instalaciones para acoger la ingente cantidad de alimentos
El material recogido comenzó depositándose en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, quedando éste pequeño al segundo día por los kilos y kilos de garbanzos, lentejas, latas, pasta, arroz y leche, principalmente que llenaron el espacio habilitado. A consecuencia de ello, el resto de las donaciones se ha ido organizando en la Peña Sevillista y, a continuación, se ha trasladado la logística a la Hacienda Belén, sede de la Delegación de Bienestar Social, desde donde se va a organizar el dispositivo de entrega. La Peña Bética del municipio también ofreció sus instalaciones para ayudar también a guardar el material.
Los cerca de 15.000 kilos de alimentos han sido ordenados por un grupo de voluntarios para que, a partir del lunes, con los datos aportados por Bienestar Social de las familias más necesitadas, Cáritas comience el reparto. Los paquetes se harán llegar a las viviendas con la ayuda de Protección Civil, para evitar que los vecinos tengan que romper su confinamiento.
