La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha absuelto al exalcalde de Algeciras Juan Antonio Palacios del delito de prevaricación por el que le había sido impuesta una condena de inhabilitación de un año y nueve meses por la sección séptima de la Audiencia Provincial de Cádiz, con sede en Algeciras, por el conocido como caso Escalinata.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso este diario, el Supremo estima el recurso de casación presentado por Palacios, que señala que se aceptan los hechos de la sentencia condenatoria, pero “teniendo por no puesto en el hecho noveno su expresión (…) a sabiendas de su ilegalidad (…)”.
El mencionado hecho noveno hace alusión a un decreto dictado por Palacios el 28 de julio de 2004, en su etapa como alcalde, en el que se exigía a los vecinos del edificio Escalinata que reparasen el edificio.
El recurso estimado por el Supremo rechaza, por tanto, que el exalcalde fuese consciente de la supuesta ilegalidad del decreto y absuelve, por tanto, a Palacios, anulando la condena de inhabilitación por un presunto delito de prevaricación.
El PSOE acoge con mucha satisfacción la sentencia del Tribunal Supremo que absuelve al ex alcalde socialista algecireño, Juan Antonio Palacios, del delito de prevaricación al que fue condenado en 2018.
“Siempre hemos creído en su honestidad y honradez porque su comportamiento siempre ha sido ejemplar. Juan Antonio no se merecía la situación judicial en la que se ha encontrado demasiado tiempo”, afirma el secretario general del PSOE de Algeciras, Juan Lozano.
Los socialistas nunca entendieron que se implicase a su compañero en una polémica decisión urbanística promovida por otras formaciones, como es el caso La Escalinata, y consideraban injusto que se involucrase al ex alcalde a partir de un decreto en el que se recordaba a los vecinos la obligación de conservar su edificio de viviendas, siempre por recomendaciones técnicas.
“En el PSOE siempre hemos estado seguros de la inocencia de Juan Antonio Palacios y lo hemos apoyado. Ahora, el Supremo confirma lo que nunca debió ponerse en duda. La trayectoria de nuestro compañero no podía ni debía ser cuestionada, ni utilizada para la confrontación política. Nos alegramos mucho por él y por nuestra organización”, concluye Juan Lozano