La Junta de Personal Docente no Universitario de Cadiz ha contactado con los delegados territoriales de Educación, Miguel Andreu; y Sanidad, Isabel Paredes, para transmitirles "su preocupación y la de todo el profesorado de la provincia por el regreso a las aulas, el próximo lunes 11 de enero, en unas condiciones realmente temerarias".
El colectivo recuerda que este regreso "coincidirá con una ola de frío excepcional que va a alcanzar temperaturas bajo cero en algunas zonas de la Sierra e interior de la provincia, con heladas generalizadas. Ello impedirá airear y ventilar las aulas como hasta ahora hemos estado realizando siguiendo los protocolos, única medida demostrada realmente eficaz para evitar los contagios como hasta ahora nos han insistido desde las autoridades sanitarias".
Por todo ello, consideran "necesaria como medida de responsabilidad pública" exigir a las Delegaciones de Salud y Educación, en representación de sus respectivas Consejerías, EL RETRASO DE LA INCORPORACIÓN PRESENCIAL A LAS AULAS, EN TODOS LOS NIVELES EDUCATIVOS, AL MENOS HASTA FINALES DE ENERO, para dar tiempo a paliar los efectos de la ola de frío y, sobre todo, los posibles brotes que puedan surgir tras los contactos familiares navideños. Máxime estando la nueva cepa británica campando a sus anchas por nuestra provincia tras haberse expandido desde Gibraltar.
En estos días se han hecho test rápidos al profesorado y personal de administración y servicios antes de su incorporación, pero no al alumnado, que, hasta ahora, ha sido el protagonista de la mayoría de los casos de incidencia de la covid-19 en los centros educativos.
"Somos defensores de la educación presencial y así lo hemos manifestado en multitud de ocasiones, pero las condiciones excepcionales que vivimos en estos días obligan a tomar medidas preventivas igualmente excepcionales frente a la pandemia. Recordamos que otros países como Gran Bretaña o Alemania han tomado la opción del cierre de los centros educativos de manera temporal, hasta finales de enero, a pesar de haber intentado a toda costa en un primer momento mantenerlos abiertos. Otras comunidades autónomas como Extremadura también han retrasado la incorporación presencial del alumnado en algunos niveles educativos", indican.
Por ello, consideran necesario "priorizar en estos momentos la salud de toda la Comunidad Educativa y mantener unas semanas la educación no presencial para beneficio de todos y todas, antes de que tengamos que lamentar los efectos de la
tercera ola sobre sus miembros y toda la sociedad. En otros países ya son conscientes de que las aulas no son ese entorno mágico y seguro que desde nuestras Consejerías se quiere trasladar a la opinión pública. Al menos no en invierno, al no poderse cumplir las necesidades de ventilación sin poner igualmente en riesgo la salud de todos".