La Policía Nacional ha detenido en la comarca gaditana del Campo de Gibraltar a tres hombres, considerados los principales responsables de una organización que cobraba por ofrecer falsos puesto de trabajo en el puerto de Algeciras y que se estima que estafó unos 850.000 euros con este método.
En una nota, la Policía señala que se les considera los presuntos autores de un delito de estafa y pertenencia a organización criminal.
Los detenidos formaban una organización dedicada durante años a captar y embaucar a multitud de personas con la promesa de conseguir un puesto de trabajo en el puerto de Algeciras, para lo que solicitaban a las víctimas que hicieran entrega de cantidades que oscilaban entre los 6.000 y los 35.000 euros.
Los investigadores de la denominada 'Operación Contáiner' estiman que el alcance de afectados ronda el centenar de personas, con un importe total que ronda los 850.000 euros. Algunos de los ellos no han querido personarse en la causa con la intención de evitar la trazabilidad del dinero entregado.
La investigación se inició a raíz de las detenciones que se llevaron a cabo por un delito de extorsión a varias de las víctimas, quienes exigían a los investigados la devolución de las cuantiosas cantidades entregadas por la inscripción en una bolsa de empleo.
La misma garantizaba supuestamente, y a través empresa de trabajo temporal, un acceso directo y prioritario a un puesto de trabajo como portuario en el puerto de Algeciras.
Agentes de la Comisaría de La Línea de la Concepción contactaron con 47 personas, víctimas y testigos de esta estafa, quienes describieron el “modus operandi” empleado.
Para motivar y fundamentar el engaño, los investigados se aprovechaban de la difícil situación económica por la que pasaban las víctimas, que para hacer frente al pago debían endeudarse tanto con entidades bancarias como con diversos parientes, aportando ahorros personales y familiares.
La estafa se encuentra fundamentada en los históricos y continuos rumores que existen en relación a las vías de acceso a los puestos de trabajo en la estiba en Algeciras. Hasta la reciente liberalización del sector, las contrataciones se hacían de manera directa y de forma discrecional por las sociedades anónimas de gestión de trabajadores portuarios.
En boca de la ciudadanía estaba que el pago de comisiones era el único modo de ingreso en los procesos de selección de las mismas, llegando a abrirse por estos hechos diferentes investigaciones policiales y judiciales a nivel nacional.
La investigación determinó que ninguno de los afectados había llegado a realizar curso de formación alguno, ni a formar parte de la supuesta bolsa de empleo, ni firmó ningún tipo de contrato o documento que acreditara la veracidad de lo ofrecido.
Por todo ello, los denunciantes han sido considerados víctimas de un delito de estafa, ya que en la mayoría de los casos nunca se ha llevado a efecto el reintegro de las cantidades entregadas.
Los investigados habían establecido, según la Policía, un claro reparto de tareas entre quienes se dedicaban a la captación de las víctimas y el presunto cabecilla, a quien iba destinado el dinero entregado y quien supuestamente mantenía los contactos dentro del puerto.
Los engaños se mantuvieron durante meses, con asiduas reuniones presenciales en diferentes locales hosteleros del Campo de Gibraltar, donde los investigados reunían a multitud de personas para dar información sobre el acceso a los falsos puestos de trabajo y las fechas de firma de contratos, aportando información actualizada de los cambios que se estaban produciendo en la organización.
Este ardid y el clima propio de seriedad que pretendían dar a esta ficción de contratación se perfeccionaba mediante llamadas telefónicas a los perjudicados haciéndose pasar por empleados de la empresa de trabajo temporal o del puerto de Algeciras.