El municipio conquense de Buendía, de apenas 400 habitantes, ha sido la primera localidad del ámbito rural de Castilla-La Mancha donde se ha instalado un cajero para luchar contra la exclusión financiera.
Se trata de una iniciativa del Gobierno regional y la Red Castellanomanchega de Desarrollo Rural (Recamder), en colaboración con Prosegur Cash, que contempla la instalación de 100 cajeros automáticos en diferentes zonas rurales de la comunidad autónoma.
El proyecto tiene como finalidad luchar contra la exclusión financiera, poniendo al alcance de los habitantes de los pueblos la infraestructura necesaria para tener acceso al dinero en efectivo.
Con la instalación de este nuevo cajero en las inmediaciones del Centro Social Polivalente, un espacio que ha cedido el propio Ayuntamiento de la localidad, se ha puesto en marcha un nuevo servicio muy necesario para los vecinos, en su mayoría de edad avanzada, que hasta ahora estaban obligados a desplazarse a municipios más grandes de los alrededores para poder sacar dinero.