Los aficionados que acudieron al Martín Carpena aún recordaban el ridículo y la falta de actitud ofrecida por el Unicaja ante el Asseco Prokom polaco hace una semana. Pero ayer fue todo diferente. El equipo cajista salió muy mentalizado, agresivo frente a un Zalgiris que no dio el nivel en el primer cuarto.
Los primeros diez minutos 21-6 resumieron lo que parecía que iba a ser todo el encuentro. Intensidad defensiva del Unicaja y un Zalgiris que muchos se preguntaban como estaba jugando la segunda fase. Escaso de calidad y con muchos problemas tanto dentro como fuera de las zonas no podía con el juego interior de los cajistas.
Pero el Unicaja, en el segundo cuarto, se dedicó a bostezar y el Zalgiris solamente aprovechándose de la endeblez defensiva firmó un parcial de 0-13 situando el marcador 29-25 (minuto 17) y poniendo en entredicho al juego de los locales, aunque el físico no les aguantó y terminaron sucumbiendo por 40-29.
El Zalgiris no se amilanó y puso en aprietos en algún momento al Unicaja, aunque éste cuando forzaba en defensa era muy superior 53-38 (m.24). El partido parecía decantado y más tras dos triples consecutivos de Welsch y Dowdell que situaron la máxima ventaja: 64-47.
Entre Dixon desde fuera, y Printezis y Archibal, dentro de la zona, se bastaron para doblegar definitivamente al Zalgiris que cayó porque las fuerzas no le dieron para más y por la diferencia de calidad de la plantilla.
El Barça pierde en el despacho
Por otra parte, el Juez Único de la Euroliga, el suizo Patrick Grandjean, ha desestimado la protesta realizada por el Regal Barcelona, respecto a la última jugada del partido ante el Partizán en Belgrado, y mantiene por lo tanto el resultado del encuentro, que se resolvió a favor de los locales (67-66).
Mediante un comunicado, Grandjean considera que su intervención en el presente asunto “no se justifica”, decisión que sustenta en que “no existe una base reguladora que le permita anular o volver a examinar la decisión de los árbitros”, que considera como “definitiva”.
El Barça presentó un recurso ante la Euroliga al sentirse perjudicado en la última decisión del partido ante el Partizán, cuando un jugador del equipo serbio barrió el balón sobre el aro una vez el tiempo ya había concluido.
Grandjean ha recalcado que los tres árbitros encargados de la dirección del partido, el italiano Lamonica, el polaco Zamojski y el ruso Mikhaylov, ya adoptaron una decisión al considerar que el lanzamiento de Pete Mickeal “no tenía oportunidad de entrar en la canasta” cuando fue tocado por Lawrence Roberts.
También indica que la resolución es “una decisión relacionada sobre el juego” y la misma “es definitiva”, respecto al resultado final del partido.
En la resolución se considera que el equipo arbitral aplicó las reglas de juego de la FIBA y que en ningún caso la decisión de la tripleta “es el resultado de una elección arbitraria”.
Además, el Juez Único ha explicado que “no existe evidencia de una eventual violación de la imparcialidad, que pueda ser contraria a los principios de la justicia y la equidad como dispone el artículo 2 del Reglamento Disciplinario de la Euroliga”.
En lo que no está de acuerdo Grandjean es en la utilización del vídeo para analizar esta última jugada del partido. El juez suizo considera que los árbitros no deberían haberlo utilizado.
En este sentido, recuerda que la repetición instantánea se puede utilizar para verificar dudas cuando “se produce una canasta o se sanciona una falta personal con el reloj de tiempo a cero”, circunstancias que no han concurrido en este caso.
Por todo ello, el Juez Único ha explicado que “el equipo arbitral no tenía ninguna razón para utilizar el vídeo y que no debía haber mostrado las imágenes a los entrenadores de los equipos o a otras personas”.