La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha protagonizado este martes una concentración ante la subdelegación del Gobierno en Jaén y en el resto de provincias de España por la pasividad del Ejecutivo central ante la histórica reivindicación de una jubilación anticipada voluntaria por coeficiente reductor para el personal de la sanidad pública.
CSIF ha explicado que “los trabajadores y trabajadoras de las instituciones sanitarias tienen unas condiciones laborales específicas que ya, de por sí, justifican que tengan acceso a coeficientes de reducción que faciliten su acceso a la jubilación anticipada, por estar sometidos a un excepcional índice de penosidad, peligrosidad, insalubridad o toxicidad”.
Asimismo, el sindicato ha hecho hincapié en el índice de accidentes de trabajo entre el personal de la sanidad en Andalucía, que es superior al 8%. Concretamente, en 2022 se han producido 9.937 accidentes de trabajo entre los 120.000 empleados y empleadas de la sanidad pública andaluza, “lo que hace que en Andalucía se supere incluso la tasa que hay a nivel nacional, del 2,5% de siniestralidad laboral, con 2.500 accidentes de trabajo entre personal de la sanidad por cada 100.000 trabajadores”, según ha detallado. De hecho, España es el segundo país de Europa con un índice más alto, detrás de Francia.
A juicio de CSIF, “estos datos de accidentes laborales entre el colectivo avalan más, si cabe, la necesidad de abrir al personal sanitario la posibilidad de acceso a la jubilación anticipada por coeficientes reductores”.
Los trabajos relacionados con el sector sanitario en general tienen riesgos laborales específicos originados por actividades, instalaciones y equipos específicos del sector sanitario (riesgos biológicos, químicos, radioactivos, psicosociales…) además de los riesgos propios asociados a cada lugar de trabajo, que determinan un plus de peligrosidad.
Además, debido al estrés que provoca en el profesional, hace que se incrementen los riesgos de presentar una enfermedad profesional o accidente laboral, así reconocida en muchas de ellas, tales como Infartos de miocardios, Ictus…
Igualmente, estos profesionales están sometidos a turnos rotatorios, guardias de 24 horas, sin respetar fines de semanas ni festivos, y tienen también que salir del centro de salud y acudir a domicilios particulares; lo que hace que su trabajo sea de alta penosidad, muchas veces limitando además la conciliación.
La Legislación prevé que la edad ordinaria de jubilación puede ser rebajada o anticipada en aquellos grupos o actividades profesionales cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, peligrosa, tóxica o insalubre y acusen elevados índices de morbilidad o mortalidad, siempre que los trabajadores afectados acrediten en la respectiva profesión o trabajo el mínimo de actividad que se establezca, se encuentren en situación de alta o asimilada a la de alta y cumplan los demás requisitos generales exigidos.
CSIF fue el primer sindicato en solicitar ante el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones la jubilación anticipada para todos los profesionales de la sanidad y reclamar reiteradamente la jubilación anticipada por factor corrector. Para ello, se han realizado múltiples acciones.
Entre ellas, el sindicato ha demandado al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones por no activar los mecanismos para incluir al personal de Sanidad en la jubilación anticipada por coeficientes reductores. Asimismo, ha hecho entrega a este departamento de más de 60.000 firmas de profesionales de la sanidad.
Del mismo modo, la central sindical ha solicitado amparo al Defensor del Pueblo, así como un encuentro con el presidente del Gobierno, al tiempo que ha llevado a cabo concentraciones en la puerta del Ministerio y en Moncloa.
