El delegado territorial de Salud y Consumo de la Junta en Almería, Juan de la Cruz Belmonte, ha indicado este martes que las restricciones en los barrios de Almería en los que se ha declarado el agua no apta para consumo humano se mantendrán indefinidamente hasta que los niveles de concentración de nucleótidos se reduzcan.
A preguntas de los medios, el delegado ha indicado que se trabaja de forma "intensa" con el Ayuntamiento de Almería y Aqualia para "poder tomar las decisiones" oportunas sobre el suministro que, por el momento, se solventa a través de camiones cisterna que acuden diariamente a la zona, sentido en el que ha recordado que es tanto la administración local como la empresa suministradora las que "tiene que poner las soluciones".
Belmonte ha apuntado que el papel de la Junta, en este caso, pasa por "velar por la salud pública" a fin de que las concentraciones detectadas a través de los análisis puedan "bajar" y volver a los niveles de recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El titular provincial de Salud ha insistido así en que el agua no puede ser usada para beber ni para preparar alimentos, puesto que no es apta para el consumo humano, si bien sí que está permitido su consumo "doméstico", esto es, para asearse o la limpieza.
