Condenados por un alijo de 4,6 toneladas de hachís que fue descubierto
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha rebajado la pena de tres de los siete condenados por un alijo de 4,6 toneladas de hachís que fue descubierto gracias a la infiltración de guardias civiles.
La sentencia del Alto Tribunal andaluz reproduce, con una ligera modificación, los hechos recogidos en el fallo recurrido, que señalaba cómo en septiembre de 2020 la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tuvo noticias sobre un grupo que buscaba colaboradores para obtener la logística necesaria para introducir por la costa grandes cantidades de droga.
Uno de los miembros de este grupo era J.G.B.B., condenado previamente en Melilla por hechos similares, quien fue contactado el 3 de septiembre por un agente de la UCO, quien pudo reunirse con el acusado en una cervecería de Valencia, dónde el procesado propuso al guardia “distintas formas de introducir sustancias estupefacientes procedentes de Marruecos en España, a través de embarcaciones”.
Tras esto, la Fiscalía Antidroga de Almería autorizó que tres agentes encubiertos se infiltraran a través del acusado J.G.B.B. en el grupo, del que formaban parte M.L.M., de origen magrebí y líder de la banda; J.G.B. y D.T.Q., que desarrollaban funciones organizativas; J.G.B.B., responsable de localizar a los colaboradores; S.A.L. y P.V. como delegados del líder.
El TSJA elimina la referencia como delegado del jefe que se había adjudicado al acusado R.E.K., y quien tampoco sabía del plan trazado por éste.
Los agentes encubiertos llegaron a recibir tres pagos por un total de 38.000 euros para trasladar en un pesquero los citados fardos de hachís, en una operación ilegal que se desarrolló el 23 de abril de 2021, cuando se encontraron en alta mar con dos lanchas rápidas que cargaron en su pesquero 155 fardos de hachís, cada uno con un peso de 30 kilos, que fueron entregados a las autoridades de forma controlada.
El 25 de abril los agentes encubiertos se encontraron con miembros de la banda en el aparcamiento de una hamburguesería de Conil de la Frontera (Cádiz) con 20 de los 155 fardos, y recibieron 192.000 euros a cambio. Tras esto, detuvieron a los miembros del grupo allí presentes.
Ese mismo día se efectuaron varios registros y detenciones en Marbella y Estepona (Málaga), de forma que el resto de detenidos fueron arrestados gracias a esta investigación.
M.L.M. fue condenado a penas por un total de 8 años y 5 meses de prisión y al pago de dos multas de 18 millones de euros; J.G.B. fue condenado a 7 años y 4 meses de prisión y a dos multas de 15 millones de euros; J.G.B. y D.T.Q. a 6 años y 2 meses de cárcel y al pago de dos multas de 15 millones de euros, y R.E.K. a 4 años y 6 meses de prisión y una multa de 1,4 millones de euros.
A S.A.L. le fueron impuestos 4 años y 6 meses de cárcel y dos multas de 18 millones de euros, y a P.V. 4 años y 1 mes de cárcel y dos multas de 9 millones de euros.
Sin embargo, ahora el TSJA rebaja la pena de R.E.K. a 2 años y un mes de prisión, con multa de 700.000 euros; la de S.A.L. a 2 años y 10 meses de cárcel, con dos multas de 9,5 millones de euros, y la de P.V. a un año, 10 meses y 15 días de prisión, con multa de 350.000 euros.