Las lluvias recientes en Andalucía han traído un alivio moderado a la prolongada sequía de la región, permitiendo ciertas concesiones como el llenado de piscinas comunitarias durante el verano en algunas provincias. Sin embargo, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, durante su intervención en un foro organizado por El País y la Ser en Sevilla, ha dejado claro que las restricciones seguirán vigentes para las piscinas privadas, especialmente en zonas como Málaga, Almería y el sur de Granada.
Moreno, haciendo un llamado a la prudencia, recalcó que, aunque las lluvias han sido beneficiosas, "no han sido uniformes en toda Andalucía", lo que mantiene a ciertas áreas en situación crítica. Este desequilibrio pluviométrico justifica la continuación de ciertas restricciones, sobre todo cuando se trata de consumo no esencial como el llenado de piscinas privadas. "Es algo que deberá decretar cada ayuntamiento", añadió, subrayando la autonomía municipal en la toma de estas decisiones.
El agua para consumo humano, es decir, potable, está garantizada en toda la región, una noticia alentadora para los andaluces. No obstante, el presidente de la Junta enfatizó que la situación hídrica en Andalucía sigue siendo preocupante, especialmente en el ámbito de la agricultura e industria, donde las limitaciones persisten. Estas restricciones impactan directamente a cultivos claves como el arroz, donde se prevé que, tras dos años sin sembrar, los agricultores podrán cultivar solo el 50% de sus terrenos.
Los pantanos, indicadores clave de la reserva hídrica, reflejan una imagen variada. Mientras que en lugares como Huelva, Sevilla, Cádiz y el norte de Córdoba se vislumbra una mejora, con Moreno anticipando la normalización del consumo humano en "15 ó 20 días", en Málaga y Almería la situación permanece tensa. En el pantano de La Viñuela, por ejemplo, el nivel de agua se sitúa en un 25,26%, y en los pantanos de Almería, el panorama es aún más desalentador, con registros que no alcanzan el 8%.
El presidente andaluz concluyó su intervención con un mensaje de cautela, instando a no caer en un "exceso de optimismo".
