Una juez de Almería ha absuelto al exgerente de la cooperativa CASI de Almería, Antonio González, tras el juicio por administración desleal por las pérdidas de 1,2 millones de euros por presunta alteración de precios del tomate 'Cocktail ' durante las campañas 2012/13 y 2013/14.
Aunque el fiscal pedía inicialmente tres años de cárcel, tras la vista oral rebajó su solicitud a un año de prisión al incorporar la atenuante de dilaciones indebidas. También suprimió su acusación contra el expresidente de CASI, José María Andújar, para el que había reclamado penas que sumaban cuatro años y cinco meses de cárcel, ya que éste fue encontrado muerto en marzo de 2022.
La sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, señala que el acusado Antonio González ejerció como director de la CASI entre 2012 y 2014, periodo en el que ejerció funciones vinculadas a la “gestión de la adquisición de productos a socios, venta a terceros y determinación de los precios”.
El fallo señala que la variedad de tomate Cocktail se comercializó durante las campañas 2012-2013 y 2013-2014 de manera directa y no por el procedimiento de subasta.
Durante la primera campaña, el importe obtenido de las ventas a clientes del tomate de la variedad Cocktail ascendió a 1,17 euros por kilogramo, mientras que el precio de compra a los cooperativistas se fijó en la cantidad de 1,53 euros por kilo.
Algo que, apunta, generó unas pérdidas para CASI de 313.905,46 euros – diferencia entre el precio de adquisición de 876.168 kilogramos de tomate en dicha campaña, 1.34.537 euros, y el precio de venta a clientes en esta campaña, 1.025.116,50 euros -.
Los gastos de manipulación, envasado, transporte y comercialización del producto ascendieron a 384.730,56 euros, y del total de tomates comprados se tiraron 147.386 kilos
En la campaña 2013-2014 se compró a los socios productores de este tipo de producto en la cantidad de 1,24 euros por kilogramo y un total de 1.371.620 kilos, con un precio medio pagado por los clientes de CASI por esa variedad de 1,27 euros por kilogramo, si bien se tiraron 267.655 kilos.
Los gastos de manipulación, transporte y comercialización ascendieron a 567.770,80 euros.
“No resulta probado si, en la fijación de precio de compra a cooperativistas, previamente se habían deducidos los gastos derivados de la manipulación, envasado, transporte y comercialización del producto”, dice la sentencia.
A pesar de que la variedad de tomate Cocktail fue solo producida por un “reducido grupo de socios” – 17 socios y sociedades de un total aproximado de 1500 socios -, no resulta probado que el acusado impidiera a los socios que plantaran y vendieran a cabo tomates de este tipo.
Tampoco que se estableciera por estos socios o con su consentimiento el precio de adquisición superior al precio de venta a clientes con el consiguiente beneficio para ellos y perjuicio para la cooperativa en las cantidades antes mencionadas.
Añade que los datos registrados en el sistema informático de la Cooperativa que reflejaban las operaciones relacionadas con la comercialización del tomate Cockatail en las campañas 2012-2013 y 2013-2014 fueron borrados, “desconociéndose si ello obedeció a una maniobra intencionada y, en su caso, la autoría de la misma y el propósito perseguido con ello”.
Tal y como solicitó el abogado de González, José Luis Labraca, del despacho Lealtadis, la juez lo absuelve de un delito de administración desleal porque el resultado de las pruebas practicadas no arroja un contenido “incriminador, directo y suficiente del que se desprenda sin género de dudas la existencia del beneficio “propio o de tercero” correlativo a las pérdidas experimentadas”.