Una juez de Almería ha absuelto a un hombre que se enfrentaba a cuatro años de prisión por un delito continuado de amenazas a otro varón al que le exigieron dinero a cambio de no desvelar que había accedido a una página web de contactos sexuales.

La sentencia apunta que el denunciante accedió el 21 de diciembre de 2021 a la ya extinta 'pasion.com' y que ese mismo día alguien contactó con él a través de un teléfono del que era titular el acusado para exigirle 500 euros, ya que en caso contrario había público su visita a esta página web.

El perjudicado accedió a realizar este pago a través de un Bizum al número de teléfono de un testigo en la causa, con una cuenta asociada, también de su titularidad.

Cinco días más tarde, la víctima volvió a recibir otro requerimiento, en esta ocasión con un número de móvil diferente, para reclamarle otros 600 euros, que ingresó en la cuenta de la que era titular el acusado.

Aunque el fiscal reclamaba cuatro años de cárcel para el acusado, y que éste abonase una indemnización de 1.000 euros al denunciante, para la juez no ha quedado probado que fuese él quien contactó con la víctima o que incorporase a su patrimonio el dinero que este hombre entregó o que supiese de las llamadas efectuadas.

"La falta de participación del acusado en los hechos enjuiciados se infiere de las manifestaciones realizadas por el acusado en el plenario, que resultaron corroboradas por el testigo -al que se le hizo el Bizum- que refirió que, tras haber accedido a la página web 'pasion.com' contactaron con él a través de unos 20 terminales móviles diferentes, obligándole a aperturar tres cuentas bancarias en las que recibir los espureos ingresos que obtenian de otros usuarios de la referida página web", dice la magistrada.

En este sentido, la juez subraya que dicho testigo denunció lo anterior y añade a esto que el propio acusado manifestó que en varias ocasiones le habían sido sustraídos el DNI y el terminal móvil, así como que que abrió la cuenta en la que se hizo el ingreso a instancias de un tercero.

El abogado del procesado, David Romera, ha señalado a EFE que fue un amigo de su cliente el que instó a éste a abrirse dicha cuenta, con la excusa de que era comercial de esa entidad y así recibiría una comisión, asegurando que nunca tuvo acceso al dinero que había en la misma.

Ha subrayado que en su momento estuvo también imputado el testigo de la causa, que ofreció una versión exculpatoria "creíble" por la que el fiscal retiró los cargos; una versión coincidente con la de su cliente que evidencia para el letrado que ambos "fueron víctimas de una extorsión".