La Policía Nacional y la Guardia Civil han activado refuerzos de vigilancia y prevención ante los "posibles incidentes" que pudieran surgir tras la muerte a tiros de un menor de 17 años en El Ejido (Almería) supuestamente a manos de un hombre de unos 30 años, ambos de distintos clanes, que posteriormente se habría suicidado en plena vía.
Fuentes próximas al dispositivo han confirmado a Europa Press que la Comisaría de Policía Nacional de El Ejido ha dispuesto refuerzos ante "posibles derivadas" del suceso que ha tenido lugar en torno a las 6.30 horas en la zona de La Loma de la Mezquita, en Ejido Oeste.
Igualmente, desde la Comandancia se han prevenido refuerzos propios y otros procedentes del Plan Carteia para la vigilancia y actuación temprana en posibles zonas sensibles en el Poniente almeriense durante el fin de semana, en su caso, estén o no relacionados con el crimen.
La investigación inicial realizada por Policía Nacional apunta a la existencia previa de un "triángulo amoroso" con una mujer, de unos 30 años, que se veía con ambos varones y el descubrimiento del supuesto homicida de la relación entre ella y el menor.
El presunto autor de los disparos habría efectuado al menos en tres tiros contra el menor cuando este trataba de huir, para lo que se disponía a coger un taxi a la altura del número 6 de la calle Francisco Ayala. Los disparos le alcanzaron en la zona del costado.
El propio taxista evacuó al menor hasta el Hospital Universitario Poniente, donde, a su llegada, los médicos no pudieron reanimarle y certificaron su fallecimiento. Los facultativos también tuvieron que atender al taxista debido a la crisis que presentaba.
De forma paralela a la evacuación, el presunto autor de los disparos se habría quitado la vida con la misma pistola de 9 milímetros en las inmediaciones del suceso, donde las autoridades localizaron su cuerpo y el arma homicida. Asimismo, se halló su vehículo en la zona, que quedó precintado.
Los investigadores sostienen que el hombre, de etnia gitana, habría descubierto la relación entre la mujer y el menor, de origen magrebíe ella y de etnia gitana él, por lo que habría ido a buscarles, lo que desencadenó los hechos posteriores.
Las mismas fuentes han señalado que se está a la espera a la autopsia de ambos cadáveres así como a la toma de declaración de protagonistas y testigos para confirmar esta hipótesis, si bien a su vez se trabaja paralelamente en otras teorías.
El delegado de Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, avanzó en declaraciones a los medios en Jaén la existencia de un presunto homicidio con un suicidio posterior en relación a los hechos investigados así como la acción de un taxista que desplazó al menor hasta el centro hospitalario.
"Están investigándose las razones, los motivos que pueda haber de fondo para ver por qué razón se ha producido este asesinato, por un lado, homicidio como mínimo; y, por otro lado, el suicidio", especificó Fernández cuando la investigación era incipiente.
El subdelegado de Gobierno en Almería, José María Martín, también se ha referido a estos hechos ante los que, según ha especificado, no hay detenidos al tiempo que ha señalado la labor de los agentes que se afanan en aclarar lo ocurrido.
