Por el “bien general” de los vecinos de la capital. Esa es la justificación que ofreció ayer la alcaldesa, Carmen Peñalver, para permitir, tras reunirse con los vecinos, el tráfico privado en el entorno de la Catedral tras las obras de remodelación de la Plaza de Santa María. “Se hace, principalmente, pensando en los residentes”, destacó. Lo hizo el mismo día en el que se cortó definitivamente la circulación en todo el entorno para iniciar los trabajos.

A pesar de anunciar la intención de reducir al máximo el tráfico privado en el entorno, Peñalver descartó que haya sido una marcha atrás del equipo de gobierno, sino una decisión que se ha tomado tras la consulta con los vecinos implicados, especialmente, los de la zona sur. “Dije que siempre lo haríamos del brazo de los vecinos y así ha sido”, destacó.

Aún así, quiso aclarar que esta decisión, que se toma en contra de la opinión del arquitecto Pérez Arroyo, tiene como principal objetivo favorecer la circulación a los residentes y al transporte público. “Es la prioridad”, advirtió.

Sin embargo, no quiso abandonar la idea de continuar con la reducción del tráfico en un futuro. “Se hará poco a poco, sin perjudicar la protección de la Catedral de Jaén”, incidió.
Estas declaraciones las hizo en la jornada de ayer, primera en la que se cortó al tráfico completamente la calle Campanas, Carrera de Jesús y Almenas para la ejecución de las obras de remodelación de la plaza.

“Dos meses y medio o tres meses de obras”
El plazo de ejecución que ofreció la empresa concesionaria de las obras durante el periodo de licitación estaba claro: dos meses. No obstante, la alcaldesa dio ayer un nuevo margen: “Espero que en dos meses y medio o tres meses estén terminadas”.

Peñalver subrayó que con estas obras se construirá “un gran escenario” para destacar el monumento renacentista obra de Andrés de Vandelvira. y un emplazamiento “ideal para diferentes actos de toda índole”.