El crecimiento de la actividad del sector servicios de España mantuvo en junio un ritmo de expansión superior a la media, según el índice de gestores de compra (PMI), que se situó en 56,8 puntos, frente a los 56,9 de mayo, impulsado por la demanda positiva de clientes tanto nacionales como extranjeros.
En junio, las empresas españolas de servicios respondieron aumentando sus niveles de personal a un ritmo notable para mantener al día las cargas de trabajo y la confianza en el futuro siguió siendo positiva, ya que las empresas esperan entornos económicos y políticos más estables en los próximos meses.
Mientras tanto, los datos de precios revelaron que la inflación de los costes se mantuvo elevada, en gran parte debido al aumento de los gastos laborales, aunque las empresas respondieron repercutiendo el incremento de sus costes a los clientes siempre que fue posible.
"El sector servicios español se mantiene inquebrantable", ha resumido Jonas Feldhusen, economista junior de Hamburg Commercial Bank, quien ha destacado que las empresas encuestadas prevén que la actividad seguirá aumentando debido a una caída de la inflación y de los tipos de interés en los próximos doce meses.
De este modo, después de que el PMI manufacturero de España frenase su expansión a 52,3 puntos desde los 54 de mayo, el PMI compuesto para el sector privado español en junio fue de 55,8 puntos, frente a los 56,6 del mes de mayo.
En este sentido, Jonas Feldhusen ha señalado que la economía española continúa mostrando buenos resultados y la caída del PMI compuesto en junio "no debería eclipsar la fortaleza actual", ya que se ha registrado un aumento tanto de la actividad del sector servicios como de la producción del sector manufacturero, aunque en el caso de este último sector el crecimiento se moderó ligeramente.
Por lo tanto, el experto confía en que el crecimiento sea superior al promedio histórico en el segundo trimestre, "después de que las sólidas cifras del PIB de los dos últimos trimestres fueran revisadas nuevamente al alza".
