Francisco S.B., el autor confeso de la muerte de una mujer de 38 años en Almería, reside en Alemania y había llegado a esta ciudad unos jornadas antes del crimen para visitar a sus padres, quienes lo habrían llamado de forma insistente al no saber de él durante varios días.
Fuentes policiales han informado a EFE de que el detenido, un joven de 28 años, está casado en el país germano con una mujer que se encuentra embarazada y han insistido en que había acudido a la capital almeriense para visitar a sus progenitores con motivo de las fiestas navideñas.
Presuntamente, el hombre es adicto a los estupefacientes y tras pasar tres días de “fiesta” y sin aparecer por casa, sus padres comenzaron a llamarlo una y otra vez para intentar dar con su paradero.
Según han explicado estas fuentes, el joven asegura que se puso nervioso y comenzó a discutir con Meri, la víctima mortal, a la que asfixió con una cadena de perro.
Precisamente, la Comisaría de Almería ha confirmado este jueves que la Policía Científica está trabajando en confirmar la identidad de la víctima por ADN. Hasta ahora el detenido la ha identificado como una chica marroquí de 38 años que conoció hace unos días.
Esta fuente ha corroborado que, según confiesa el investigado, asfixió a la víctima en el coche de él con una cuerda o cadena de perro. Ha asegurado que se asustó y llevó el cuerpo a un descampado del bario de Retamar, donde le prendió fuego.
El descampado se encuentra en el paseo de Castañeda, a unos minutos del ya extinto asador ‘La Capea’, junto a destartaladas viviendas en las que residen personas de origen extranjero.
Unos vecinos han apuntado a EFE cómo este lunes por la tarde pudieron ver a la Policía Nacional en una hondonada cubierta por un frondoso árbol que se encontraba en llamas.
Estos testigos no sabían que allí se encontraba el cuerpo de una mujer, pero sí que pudieron ver cómo los agentes extinguían el fuego y varias personas con “guantes” trabajaban sobre el lugar, del que extrajeron el cuerpo sin vida de la chica.
Meri es hija de Sofía, responsable del bar ‘El Indio’ de la barriada almeriense de Los Molinos, en el que también trabaja su hermana, Sarai, que este jueves por la mañana se encargaba de elaborar las tostadas por las que es conocido este establecimiento en toda la ciudad.
La familia de la víctima explica que la mujer tenía una hija de 20 años y que no trabajaba en el bar y que en estos momentos no tenía empleo.
Han reconocido que la fallecida tenía un problema de adicciones desde hace bastante tiempo, y que tenía una vida "bastante libre".
Sin relación con una app de citas
Han asegurado que la víctima había comunicado que no iba a acudir a cenar con la familia el día 31, ya que iba a estar con unos amigos, aunque el lunes por la tarde la Policía Nacional ya comunicó que habían encontrado un cuerpo que podría ser el de ella.
Un cuerpo que ha sido identificado por sus pertenencias, ya que debido al estado en el que se encontraba a causa de la incineración no podía ser reconocido.
También han insistido en que la víctima no tenía 'Tinder' u otra aplicación de citas, como se pensó en un principio, subrayando que la Policía ha confirmado a la familia que no fue así cómo se produjo el encuentro.
Algo en lo que también se ha insistido desde la propia Comisaría de Almería, así como desde la empresa responsable de 'Tinder', que ha incidido que el crimen no tiene ningún tipo de relación con la app.
No fue violencia machista
Según ha informado, por su parte, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el Juzgado de Instrucción número 6 de Almería, en funciones de guardia, decretó este miércoles, a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de un hombre detenido este pasado lunes como presunto autor de la muerte de una mujer en la capital almeriense.
Inicialmente, se le atribuye un presunto delito de homicidio. Durante su comparecencia judicial, el detenido prestó declaración. La causa, que inicialmente no se tramita como violencia de género, será investigada por el Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, que se encontraba en funciones de guardia cuando ocurrieron los hechos.