El Ejército de Israel ha vuelto a atacar este martes de madrugada los suburbios de la capital libanesa, Beirut, en el segundo ataque de este tipo desde el alto el fuego alcanzado en noviembre de 2024, puesto que hace apenas cuatro días lanzó un ataque con drones contra un edificio en esta misma ciudad tras el disparo de dos proyectiles desde territorio libanés contra el norte de Israel.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han indicado que "aviones de combate, bajo la dirección del Shin Bet, han atacado recientemente a un terrorista" del partido-milicia chií libanés Hezbolá en el barrio de Dahiya. "Representaba una amenaza real e inmediata, por lo que actuamos para eliminarla", reza un comunicado.
Las FDI han asegurado que su objetivo "había estado dirigiendo a operativos" del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y "ayudándolos en un intento de perpetrar un grave atentado contra ciudadanos israelíes en el futuro inmediato". En este sentido, han prometido "continuar actuando para eliminar cualquier amenaza a los ciudadanos del Estado de Israel".
Por su parte, la cadena Al Manar, afín a Hezbolá, ha informado de que el ataque ha tenido lugar sobre las 3.30 horas (hora local) y que ha "causado varias víctimas civiles", si bien por el momento no ha proporcionado un balance de víctimas. Los equipos de ambulancia han trasladado a los heridos a hospitales cercanos, mientras que dos edificios han quedado destruidos y otros tres han sufrido daños.
Las partes llegaron a un acuerdo de alto el fuego por el que además tanto Israel como Hezbolá debían retirar sus efectivos del sur de Líbano. Sin embargo, el Ejército israelí no se ha retirado por completo y ha mantenido cinco puestos en territorio de su país vecino. Además, ha ejecutado diversos bombardeos durante las semanas posteriores al alto el fuego argumentando que actúa contra actividades de Hezbolá y que, por ello, no viola el alto el fuego, si bien tanto Beirut como el grupo se han mostrado críticos con estas acciones.
