El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que los funcionarios de cualquier administración pública que cobren menos de 1,5 veces el salario mínimo interprofesional (SMI), bruto, concretamente 962 euros, no verán suprimida la paga extra de Navidad.
En respuesta a una pregunta del senador de la Entesa José Montilla en la sesión de control al Gobierno, Montoro presentó esta precisión como un anuncio, aunque posteriormente apuntó que se trata de una excepción que ya se contempla en el decreto de medidas de ajustes publicado en el BOE el pasado sábado.
En declaraciones posteriores a los medios, Montoro ha asegurado que el Gobierno no tiene estimaciones del número de funcionarios que mantendrán esta paga extra, ya que sólo cuenta con datos de la Administración General del Estado (AGE), nivel de la administración en la que ha asegurado que hay más de 15.000 de estos funcionarios "mileuristas".
En plena oleada de protestas en las calles de los trabajadores de todas las administraciones, Montoro ha explicado que si no se hizo hincapié en esta cuestión en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado viernes fue por la "dificultad de condensar un decreto tan amplio" en una sola comparecencia.
Una vez puesto el acento en la cuestión, Montoro ha señalado: "A ver si tengo suerte, y algunas personas se sienten liberadas por ello".
LAS MEDIDAS "MERECEN LA PENA".
En cuanto al resto de medidas adoptadas el pasado viernes por el Gobierno, el ministro de Hacienda ha asegurado que "van a merecer la pena", aunque ha reconocido que son decisiones "dolorosas" para el Gobierno. "Desde esa confianza reclama ese esfuerzo, para insistir que vale la pena hacer el esfuerzo para dentro del proyecto europeo poder ver la luz al final del túnel", ha apostillado.
"El Gobierno ha adoptado estas medidas porque las circunstancias son inesperadas", ha señalado a renglón seguido para recordar que el Ejecutivo ha tenido que hacer frente a un "déficit oculto", así como a "duras condiciones de financiación" porque el PSOE dejó las administraciones "como las han dejado". "Sobre todo las autonómicas, como dejó usted Cataluña, señor Montilla", espetó.
LA "OBLIGADA" SUBIDA DEL IVA.
Por su parte, tanto desde CiU como desde el Grupo Socialista se ha planteado al ministro de Hacienda de qué manera repercutirá la subida del IVA en las cuentas de las comunidades autónomas y sobre la actividad económica y se le ha echado en cara que el Gobierno haya adoptado esta medida contra la que se ha posicionado en meses anteriores.
En este punto, Montoro ha dejado claro que ésta y el resto de medidas han sido "obligadas" por las instituciones internacionales, que han visto en la falta de acceso de España e Italia a la financiación el primer paso hacia la "debacle" de la economía mundial.
"Los organismos internacionales nos están recomendando y casi creando la obligación de subir el IVA a cambios de una reducción de cotizaciones sociales", matizó a continuación.
Para terminar, Montoro indicó que el Gobierno "está haciendo en términos de equilibrio presupuestario un equilibrio que el anterior Ejecutivo no hizo para nada". "El Gobierno lo que está haciendo es cumplir con sus obligaciones y que en ese cumplimiento haya una distribución lo más equitativa posible", zanjó.