Es un proyecto piloto con vocación de continuidad para acercar la cocina a todos
La oferta formativa externa o cursos de cocina para no profesionales de la Escuela de Hostelería de Cádiz ha registrado ya 146 inscripciones desde su inicio en noviembre, lo que confirma el éxito de la iniciativa, que se espera cerrar en junio con más de trescientos participantes. La dirección del centro ha querido “acercar la cocina a todos”, explicó el director de la Escuela, Aurelio Crespo, quien agregó que se trata de una “experiencia piloto” con vocación de continuidad. Según argumentó Crespo, la Escuela de Hostelería había registrado “mucha demanda de actividades puntuales por parte de asociaciones y colectivos”. Ello hizo plantear la posibilidad de ofrecer talleres para aficionados a la hostelería, organizándose 22 cursos entre noviembre y junio. “Son cursos cortos, no superan las 30 horas y se reparten en varios días a la semana para adaptarnos a las necesidades de los asistentes”, comentó. La temática es muy diversa y va desde la comida y la repostería navideña, a la cata y el maridaje de platos, pasando por cocina marroquí, creativa o vegetariana, entre otros muchos. La idea de la Escuela es adaptar la oferta a la demanda y los asistentes tienen mucho que decir; serán ellos los que determinen que talleres continuarán el próximo año y cuáles entrarán nuevos, planteándose posibilidades como cocina dietética o para celíacos. “Son cursos participativos, con práctica al mismo tiempo, en los que la Escuela pone todos los materiales, por lo que el precio de la matrícula es mínimo. Además te puedes llevar el plato a casa”, indicó Crespo, que aclaró que “el objetivo no es sacar beneficios; nos interesa es salir a la calle”. Los precios oscilan entre los 15 y 180 euros dependiendo de las horas del curso. El director de la Escuela explicó que, mientras en la cocina profesional hay muchos hombres, en la cocina de aficionado predominan las mujeres. Sin embargo, en estos cursos se ha notado una presencia masculina importante que Crespo achaca al carácter independiente de la vida actual. Aunque siguen estando en minoría, su interés por la cocina va en aumento. De hecho, el 42,5 por ciento de los inscritos son hombres (62 varones y 84 mujeres). Otro dato importante es que estos talleres están abiertos a todas las edades. Entre los alumnos hay “desde adolescentes hasta jubilados”, apuntó el director de la Escuela.