Eternidad

Hoy es siempre todavía, veo en el correo de una amiga. En la juventud se encuentra toda la esencia de la vida, lo demás es espera. Hay viejos que se empeñan en devaluar el tiempo que viven los jóvenes y optan por dejarlos vacíos como hace la ardilla con las nueces. Este tiempo, amigos, es de ellos como lo fue el nuestro que comenzó entonces, que cada cual recuerde, y está llegando a su final. Su juventud se superpone así con nuestro volver de todo, escamoteando con un chanchullo lo que les pertenece. Decir que este tiempo es peor supone sembrar pesimismo, que es como regar de sal el campo del vecino.
Algunos están alborotando demasiado con que esto no funciona cuando lo que ocurre es que no todos se someten a pensar de la misma forma. Siempre ha sido así pero estamos acostumbrados a disimular lo que no nos equivale y a anular la discrepancia; ni es mejor ni peor, es lo mismo, sólo que ahora está todo a la vista y es diverso. Hoy es igual que ayer, pero se ve lo diferente porque nos hemos cansado de meterlo debajo de la alfombra.
Son inseguridades infantiles a las que los mayores no estamos acostumbrados. Cómo vamos a vernos iguales si somos diferentes, así es la cuestión de estúpida. Qué miedo les da a algunos verse distintos, educados como están en la uniformidad. ¿Es que un hombre es idéntico a otro hombre? ¿Es que un día es igual a otro día?
Hacen gracia las mentalidades pasadas de fecha con el trajín que se traen de que esto anda mal, peor que nunca, como si lo que está callado no estuviera y si Dios no viera por debajo. Siempre hubo blasfemos, inmorales, ladrones, pero nunca hubo libertad para manifestarlo, eso es todo.
Yo entre las conductas de hoy secándose al sol y las de ayer a oscuras no dudo, porque lo oculto siempre está en la sombra; y si me apuras mucho, peor lo de ayer que terminó en una guerra fratricida. ¿Vais a poner de modelo aquellas fechas? No coincidiréis entonces con los jóvenes por ese camino, pero ya sé que se os da un higo, que lo vuestro es discrepar para someter, buen deporte. Sólo existía lo oficial del NO-DO, las demás miserias permanecían ocultas fomentando una trastienda que explotaría más tarde o más temprano. Algunos recibieron un mensaje en su educación que ya no son capaces de madurar y otros reaccionaron con una violencia desusada de corazón poco noble. Ni unos ni otros. Quiero una sociedad en paz regida por las leyes de la moderación y una mente ágil dispuesta a todo cambio que sea una promesa de luz.
Líbranos, Señor, de los anclados, de los que creen en la eternidad confundiendo tu inmenso Ser con la pobre esencia humana que vive de tu amparo. Los que se llenan de tu fortaleza y te defienden aplastando hermanos no quieren esperar en tu misericordia y juzgan a los iguales antes de que vengas como Juez al final de los tiempos. Serás severo con los intolerantes, inflexible con los engreídos y no permitirás que se castigue a la ignorancia de los pobres ni a la miseria de los marginados: en esto pongo mi esperanza. Entonces se verá claro a la luz de la verdad cómo este mundo anda fuera de sus quicios. Andalucía es experta en señalar injusticia con su cante. Una vez todo limpio, comenzará lo eterno. Antes todo es cambiante.