En un principio, la restauración de dicha obra, fechada en el siglo XVIII, no entraba dentro del proyecto de conservación-restauración llevado a cabo en este recinto tan emblemático de la ciudad, enmarcado en el convenio de colaboración suscrito entre la Consejería de Cultura, la fundación Caja Madrid y la Wolf Monument Fund, firmado el 18 de septiembre de 1997.
El grupo Pentecostés está compuesto por cinco piezas pictóricas realizadas al óleo sobre soportes mixtos más la paloma que representa al Espíritu Santo que está realizada en madera policromada y estofada.
Hasta el momento de proceder a su restauración, el grupo se encontraba almacenado uno sobre otro, de forma que los elementos punzantes del reverso agujerearon los tejidos.
La actuación que se ha llevado a cabo ha respetado en todo momento, según el IAPH, la singularidad del bien, interviniendo “sólo en las zonas justificadas” y empleando “materiales reversibles y análogos a los del bien”.
La primera fase de la intervención se basó en la limpieza de la suciedad supercial de forma mecánica y reposición de las piezas perdidas o gastadas. En segundo lugar se envolvió el anverso con un empapelado de protección para la fijación de la película pictórica, concluyendo con la aplicación de un barniz de protección final sobre la obra.
Esta intervención, que ha precisado de los trabajos de un coordinador y dos restauradores, ha supuesto una inversión de 33.384 euros. En total el IAPH destinó al Oratorio de la Santa Cueva casi 280.000 euros. Un montante que ha servido para que éste recupere todo su esplendor.
