Dos importantes solares en Cádiz pasarán a manos de la Junta como parte del pago de la deuda histórica del Estado. En Puntales y en plena avenida Cayetano del Toro la administración autonómica construirá VPO. Es la polémica forma en que se paga la deuda y que el Ayuntamiento rechazará ante la justicia. El delegado, que asumió el cargo el pasado mes de mayo, repasa las principales actuaciones de la Junta y la actualidad en la capital y la Bahía.
—¿Cree que la deuda histórica está bien pagada con terrenos?
—Creo que son los únicos terrenos que tiene Patrimonio del Estado en Cádiz. Otras instancias puede que tengan otras propiedades, pero en una ciudad con tan poco suelo como Cádiz que hayamos tenido la suerte de que en el pago de la deuda histórica haya dos suelos de la entidad de los que hay en Cayetano del Toro y en la zona de Puntales, con la capacidad de vivienda que pueden albergar, pues es una buena noticia. Va a suponer un alivio para la promoción de vivienda protegida en Cádiz, que no es poco.
—Se calculó en una primera estimación que pueden construirse unas 140 o 150 viviendas.
—Lo que habrá que ver es cómo se recoge en el nuevo planeamiento. Si se fuera a construir ahora sería con lo que venga en el actual y si la cosa se dilata pues habrá que ver qué es lo que se incluye. De todas formas, 150 viviendas en una ciudad con tan poco suelo como Cádiz es una magnífica noticia. San Fernando, con 675 metros cuadrados, no creo que esté incluido en esas viviendas, pero hay que ver las condiciones del solar.
—¿Y al vecino de Jerez o de El Gastor cómo le beneficia esa deuda histórica en forma de VPO en la capital?
—A ese vecino le repercute también porque no podemos olvidar que la totalidad del suelo que se va a poner en carga beneficia a cualquier ciudadano, sea de donde sea. Hoy en día con el nuevo registro de demandantes de viviendas que tienen una base municipal, tú puedes solicitar ser demandante de vivienda en tres municipios. Si un vecino de El Gastor tiene necesidad de una vivienda en Cádiz puede pedirla perfectamente. Pero, de cualquier manera, lo que sea ahorrar costes a la hora de adquirir suelo para construir viviendas protegidas, si ese dinero que había que gastar, ya no hay que gastarlo en Cádiz que es donde puede estar el metro cuadrado mucho más caro, pues va a beneficiar al resto de ciudadanos porque vamos a tener dinero para gastar en el resto de la provincia.
—Irónicamente los terrenos son en Cádiz, donde su Ayuntamiento no elabora el registro de demandantes.
—El registro estoy convencido de que es una magnífica herramienta porque nos va a permitir conocer realmente las necesidades y la demanda de vivienda en el ámbito concreto del municipio y al mismo tiempo tan a la carta como para saber cuántas personas necesitarían viviendas en venta, cuántas en alquiler con opción a compra, de cuántas habitaciones... Cualquiera se podría inscribir perfectamente en el registro, un registro que todavía no se ha creado y parece que no se va a crear en Cádiz. Es una herramienta potentísima que nos permite planificar las necesidades de vivienda en cada municipio en función de la demanda. Pero cada ayuntamiento es libre de hacer lo que estime oportuno. También es verdad que en Cádiz, en los últimos diez años, desde que se puso en marcha el plan de rehabilitación del casco histórico, la actuación de la Junta ha venido generando un número de viviendas tan importante que ha permitido dar respuesta a muchísimos problemas de demanda de vivienda. Y ahora mismo, sin ir más lejos, tenemos actuaciones tan potentes como la de la calle Osorio, donde vamos a poner a disposición de los ciudadanos más de 50 viviendas y tenemos pendiente las dos fases de Matadero, de 102 viviendas cada una. Y bueno, eso son viviendas que van a venir a resolver los problemas de los vecinos. Y ahora las dos nuevas promociones. Una en Cayetano del Toro y otra en Puntales, con lo cual estamos poniendo viviendas en el mercado para tratar de poner solución a lo que nos plantean, a lo que conocemos desde la Oficina de Rehabilitación.
—Y no se pueden usar esos terrenos para otros fines, ¿serán viviendas con total seguridad?
—Sí claro, los fondos para uno y otro son para viviendas.
—El presidente José Antonio Griñán mostró su deseo hace un mes de reducir las delegaciones provinciales a la mitad y potenciar el papel político del delegado del Gobierno, que asumiría más trabajo. Sin embargo, nos encontramos con que precisamente se han reducido sus competencias porque ya no se encarga de Consumo ni de Inmigración.
—Lo que ha dicho el presidente es que se abría un proceso de trabajo, hay un grupos de expertos trabajando en la materia y las conclusiones las tendremos en primavera. Hasta entonces no sabemos por dónde van las recomendaciones. Es verdad que ahora la materias de Inmigración y Consumo han pasado a Empleo y Salud, lo cual es lógico por otra parte. Pero, no podemos olvidar que desde que se crearon la delegaciones del Gobierno, el delegado es el representante de la Junta y el que coordina la acción política de las diferentes consejerías.
—Federico Pérez Peralta ha dicho esta semana que en Cádiz toca la lotería todos los días gracias a la Junta, ¿qué le parece la frase?
—Es una comparación, pero bueno, no va descaminado, en el sentido de que la inversión es importante. Cada día en esta provincia se invierten 13 millones de euros, lo cual no es poco. Es una cantidad considerable a lo largo de todo el año. Es la comparación que buscaba Federico, 13 millones de 92,4 millones diarios en toda Andalucía. La lluvia de millones diaria la ha convertido en una comparación. Pero bueno, como otra cualquiera.
—La Junta quiere que la rehabilitación del Casco Histórico esté completa para 2012. ¿Llegará?
—En el casco histórico se está trabajando desde el año 99 y queríamos, y así se ha dicho, que fuera una aportación más de la Junta al Doce. El objetivo es erradicar la infravivienda en 2012. ¿Que no se termina en el 12? Pues se termina en 2013 y no pasa nada. Y no pasa nada. Es verdad que cada día hay menos infravivienda en Cádiz, aunque sigue habiéndola. Yo he tenido la oportunidad, por decirlo de alguna manera, de conocer viviendas en muy malas condiciones en esta ciudad y afortunadamente, he vuelto al cabo del tiempo y las he encontrado completamente distintas. Por ejemplo, la calle Juan Paje, que cuando volví no tenía nada que ver. Ahora mismo estamos detrás de comprar un buen número de fincas, pero en ese punto hace falta la colaboración de los privados. Con la colaboración del propietario del inmueble y las ayudas de eliminación de la infravivienda del nuevo programa de 2009-2012 podríamos ir mucho más rápido. Pero no podríamos hacerlo solo la Junta, sino que necesitamos la colaboración de los propietarios de los inmuebles.
—Y del Ayuntamiento
—Y del Ayuntamiento.
—¿A qué achaca el enfrentamiento entre Junta y Ayuntamiento por la rehabilitación?
—Yo no veo problema. Es que son diferentes maneras de ver las cosas. Cuando yo estuve en la Oficina hubo siempre un clima de colaboración total y absoluto y luego han iniciado una serie de actuaciones de vivienda, en el marco de Procasa. Nosotros llevamos las nuestras y cuando ha habido algún caso de infravivienda, pues se ha colaborado. Aquí no hay ningún tipo de problema. Lo que pasa es que ellos tienen unos tipos de programa muy específicos que no son los mismos que los nuestros.
—Pero el Ayuntamiento se ha quejado siempre de que vivienda es su competencia.
—Pero es que el Ayuntamiento olvida que el programa que se puso en marcha en el 99 se ha convertido en un referente para el resto de Andalucía. Y sin ir más lejos, en la provincia tenemos programas de rehabilitación iguales en Jerez, en Sanlúcar, en Alcalá de los Gazules, en San Roque, en Arcos... y estamos rehabilitando con el mismo sistema y allí no tenemos ningún tipo de problema con los ayuntamientos.
—¿Por qué cree que el proyecto de la plaza de Sevilla no ha salido adelante como se concibió?
—Desde mayo acá he visto siempre un clima de total entendimiento. Hay una divergencia primera, que era el mantenimiento de la Aduana, que una parte no lo entendía. La Aduana tiene una serie de valores, como cualquier edificio, y en un momento determinado se decidió protegerla. Ahora mismo lo que se va a hacer es la parte trasera que viene a dificultar, lo cual va a permitir que el edificio se quede exento y no imposibilita el desarrollo del resto de la intervención. En la última reunión, hace apenas una semana, se acordó que para agilizar se hiciese un estudio de detalle, se dividiese en parcelas, con una específica para la estación de autobuses y el resto para el hotel y edificio de oficinas. Cuando nos hemos sentado, no hemos puesto de acuerdo. Yo creo que lo realmente importante es que en el entorno de la plaza de Sevilla nos vamos a encontrar con un centro intermodal de transportes, donde vamos a tener, tren, tranvía, autobuses y el barco. Es con lo que debemos quedarnos realmente, con el nudo de transportes y cómo va a cambiar todo el entorno.
—Pero el Ayuntamiento no da por hecho que se quede en pie la Aduana.
—Lo cual es lógico también. Tú no varías planteamientos de hoy para mañana. Si tú has estado defendiendo que en tu modelo de ciudad eso te estorba, pues lo lógico es que vayas hasta la última instancia en la que te puedes defender. Nosotros estamos convencidos de que es un edificio a proteger y como tal lo hemos hecho, y en ese sentido pues hemos respetado la petición del colectivo ciudadano que demandaba la protección de la Aduana como los informes técnicos que avalan las invariantes del edificio como digno de conservase.
—El tranvía se va a llevar casi 44 millones de inversión el próximo año por parte de la Junta. La consejera confirmó que por ahora se queda en la plaza de Sevilla, pero que está abierta a la posibilidad de que vaya más allá. Y más allá va un colectivo ciudadano que se está creando para que circunvale el centro, ¿qué le parece?
—Eso sería ideal. Eso sería quitar muchísimos vehículos del casco histórico. Sería una magnífica noticia: poder conseguir que el tranvía circunvale todo el casco antiguo. Pero ahora la perspectiva municipal es que se llegue hasta la plaza de Sevilla y en ese sentido se está trabajando desde la Consejería. ¿Que luego se puede ampliar? Pues bienvenido sea. Todo lo que sea mejorar la accesibilidad de los centros históricos es objetivo prioritario de la Junta y una de las grandes medidas es la apuesta por el tranvía. Con el horizonte de cuatro o cinco años nos encontraremos que el tranvía forma parte de nuestro modo de vida en la Bahía. Nos va a permitir comunicarnos sin necesidad de usar el coche y si conseguimos que en la ciudad también sería muy bueno.
—¿No le parece algo frívolo hacer un plan público para hacer legal lo que es ilegal? Me refiero a las viviendas ilegales de Chiclana.
—Nada más alejado. No, no, no. Chiclana es un municipio, y no me canso de repetirlo, que está trabajando el tema del Urbanismo de una manera muy ordenada, muy consecuente y sabiendo lo que quiere conseguir. El problema de viviendas irregulares se está tratando de regularizar con una herramienta que se llama área de gestión básica. Vienen perfectamente reguladas en el Plan de Ordenación de Chiclana y el objetivo del Ayuntamiento es regularizar por áreas, en las que los propietarios contribuyan a las cargas de la urbanización. Es decir, electricidad, abastecimiento, saneamiento y reurbanización, o urbanización, de estos ámbitos en función del número de metros que cada uno tiene. Es lo justo. Además, este fenómeno no es exclusivo de Chiclana, porque hay otros puntos de la provincia donde también se da. Tenemos el mismo problema en Conil y en El Puerto de Santa María.
—¿Y habrá que actuar igual que en Chiclana?
—Estamos hablando de muchos miles de viviendas y el planeamiento debe darles respuesta. El nuevo planeamiento de El Puerto debe ir en esa línea, de hecho es el mismo redactor que de Chiclana. Y en el caso concreto de Conil, aunque los redactores son otros, sí tienen un plan redactor remitido por Chiclana y El Puerto. Pero quiero destacar que se regularizará lo que haya que regularizar, en estos municipios desde el planeamiento y en cualquier municipio con una figura nueva que son los planes municipales de inspección, que es una figura en la que algunos ayuntamientos ya están trabajando, como Chipiona. Cuando se termine ese documento, tendremos una foto fija del territorio en la que tendremos qué número de viviendas irregulares hay, cómo se agrupan y cuáles pueden ser regularizadas, cómo, y qué queda fuera de regularización con licencia provisional. A partir de ahí lo que tiene que quedar claro es que la labor de inspección no debe permitir mover ni un solo ladrillo más.
—¿En qué punto se encuentran los informes que elaboran las delegaciones provinciales, especialmente Vivienda y Cultura, respecto a la aprobación del nuevo PGOU de Cádiz?
—Evidentemente lo están trabajando las delegaciones. Ahora mismo los dos grandes planes son los de Cádiz y El Puerto. Sobre los informes no me puedo pronunciar porque no los conozco. Pero también estarán trabajando otras delegaciones y también la Diputación.
—¿Nadie va a responsabilizarse de lo que ha sucedido, y lo que está sucediendo, con Las Aletas?
—Creo que es un problema derivado de la demanda de Adena. Eso nos crea inseguridad, pero estamos esperando que la Abogacía del Estado emita el correspondiente informe jurídico para seguir adelante. Y lo que está claro es que ese proyecto habrá que sacarlo adelante porque es el único suelo con posibilidades que nos queda en el entorno de la Bahía. Si hablamos de transportes, no vamos a encontrar un suelo mejor comunicado y tiene que servir como motor económico de toda la zona, y más si tenemos en cuenta que han dicho los empresarios que hay una gran necesidad de suelo. No podemos olvidarnos de que ahí hay más de 200 hectáreas que son propiedad de la Junta en las que se podría estar interviniendo, pero no se está haciendo porque el proyecto es global.
—¿Y cuando tendremos Las Aletas en funcionamiento?
—Esto es un parón enorme en los planteamientos iniciales. Ahora mismo queda cuándo se reformula por parte del Consejo de Ministros.
—¿Qué tal marcha la ejecución de las obras del Oratorio?
—Magníficamente. Tuve la oportunidad de estar en el Oratorio hace dos semanas y me sorprendió cómo iban los trabajos.
—Hay quienes afirman que el nuevo Hospital se quedará pequeño ya el día de su inauguración.
—El proyecto se está elaborando hoy en día. Las perspectivas con las que se están trabajando son las de darle ámbito regional.
—Esta semana hemos conocido la rúbrica del acuerdo para la ampliación del solar de la Ciudad de la Justicia, una obra que también corre peligro de quedarse pequeña cuando se abra.
—El primer proyecto era insuficiente, pero ahora no habrá problema. Además, todo ha quedado desbloqueado tras la firma de la permuta con la Diputación de las oficinas del INEM.
—¿Cree que se cumple el pacto del Bicentenario?
—Lo único que puedo decir del Bicentenario es que se está trabajando para que el Doce deje un legado. Para que 2012 sea el año de Cádiz. Todo lo que se está haciendo, con la mejora de la hostelería aprobada el pasado martes por el Consejo de Gobierno, y todo lo que se va a hacer, la de eventos que vamos a tener, de congresos y de actividades es increíble. Y eso sólo puede sacarse adelante con el entendimiento de todas las partes.
—¿Los políticos deben por sistema dar a conocer su patrimonio?
—Me parece magnífico. Me parece un ejercicio importante para que se preserve la honestidad de los políticos. Creo que esa transparencia hay que tenerla al entrar y al salir.
—¿Tiene pensado cambiar alguna presidencia de plaza de toros este próximo año?
—Todavía no me lo he planteado. Hombre, es verdad que este año hemos tenido ciertos problemas en El Puerto, pero tengo que decir que Ana Alonso (presidenta del coso portuense) tiene mi apoyo total y absoluto.
—¿Por qué se llevan las dependencias de la Policía Autonómica de Cádiz a Puerto Real? ¿Cómo marcha el traslado?
—Está el proyecto, pero todavía no se ha iniciado la obra. Está junto al nuevo puente. Se pensó en términos de eficiencia a la hora de movernos. A la Policía Autonómica, uno de los temas que más tiempo ocupa es el traslado de menores en el ámbito de la Bahía y en el Campo de Gibraltar, donde no tenemos Policía Autonómica. Para hacer un traslado de Algeciras se hacen 240 kilómetos. Esto de llevar la comisaría de Cádiz a Puerto Real no resuelve el problema, pero sí resuelve problemas de tiempo. Nos va a permitir un cierta agilidad a hora de movernos. En época de incendios, la Policía Autonómica forma parte del dispositivo Infoca y está en los parques naturales, no es en Cádiz donde trabajan. Por lo tanto, cualquier modificación que mejore nuestra salida y nuestra entrada nos simplifica enormemente nuestros tiempos.
—¿Qué le pareció el rodaje de ‘Knight & day’ cuando se escaparon los toros?
—Lo del incidente me pareció muy grave, muy, muy grave. Nosotros no intervenimos porque no teníamos la competencia. Es decir, no era un espectáculo taurino sino un acto privado. La competencia era estrictamente municipal. Yo creo que las primeras medidas eran bastante deficientes. Yo vi el cerramiento en los primeros días y pensé que, por muy mansos que fuesen, los animales pueden dar un susto. Y realmente lo dieron. Porque claro, el problema es que cuando tú te ves a siete morlacos venir de frente, tú no sabes si son bravos o no son bravos, además, como cualquier animal, te arrolla. No, no, yo creo que el Ayuntamiento debería haber tomado desde el principio una decisión mucho más drástica, porque la población estuvo expuesta. Que estamos hablando de animales de 500 kilos.